Si hay algo que nos emociona de una obra de arte es la sensibilidad del artista, la esencia que deja en cada una de sus piezas. Os queremos presentar a Kari Herer, fotógrafa de profesión y especialista en los retratos. Su pasión por la naturaleza y los animales queda plasmada a la perfección en sus obras, una fusión entre trazo y vida, una imagen pura y bella del animal. ¿No parece tremendamente precioso el contraste entre un dibujo o fotografía que recoge una escena en un momento determinado (llamémosle momento estático, capturado en el tiempo) y las flores y plantas efímeras, vistiendo ese momento? Es una bonita metáfora, ayer es pasado es un recuerdo y hoy es vida.Ahora después de este estudio profundo de la obra, ¿a que son geniales?