La película “Drive” tiene unos 10 primeros minutos antológicos. En ellos, un conductor sin nombre, a lo James Dean o a lo Steve McQueen (Ryan Gosling), a veces mudo, otras mítico, resulta protagonista de una mini trama a los mandos de un Impala plateado. Lo que viene después, cuando acaba la tensión y aparecen los títulos de crédito iniciales, es uno de los mejores momentos cine-música que se recuerdan. Es en ese momento cuando escuchamos por primera y última vez el tema central de la película.
Nightcall es la obra maestra en forma de canción del productor y dj francés Kavinsky. Su estilo no nos gusta, pero esta es una excepción. La letra es genial por su simpleza, y el tema, eminentemente electrónico, cuenta con la acertada colaboración en las voces de la guapa de CSS (Lovefoxxx), la producción de un Daft Punk y remezclas hasta la saciedad. Hoy buscamos el por qué no la descubrimos hace meses. Sin duda, la joya de la corona de una interesante banda sonora.
En cuanto a la película, recordar que este no es un blog de cine, pero si tenemos que dar nuestra opinión (humilde) más allá de esos primeros 10 minutos (fanáticas con carpetas forradas de Ryan Gosling nos perdonen) recomendamos no verla, es una puta mierda. Hay que reconocer que el protagonista está francamente bien en su papel, que está muy bien hecha y que la banda sonora de Cliff Martínez es una joya. Pero como película… sorprenden todas esas buenas críticas. Quédense con el tema central, con la secuencia completa, con los 10 primeros minutos. Esos son para disfrutar.
“There’s something inside you,
It’s hard to explain”