El monte Kékes (traducido como "azulado") es el más alto de Hungría, y se encuentra cerca de Budapest, en los montes Mátra. Su cima (Kékestető) está a 1.014 metros de altitud, y de hecho es el único monte del país que supera los 1.000 metros. La segunda cumbre, también en los Mátra, está a 971 metros de altura. Hungría no es un país de grandes cumbres, aunque cerca están los Alpes, en la vecina Austria.
Con 1.014 metros de altura, el monte Kékes es el más alto de Hungría, como reza el cartel situado junto a la famosa piedra de Kékestető
Kékestető se encuentra cerca de la ciudad de Gyöngyös, a 80 kilómetros de Budapest, por lo que es una excursión habitual entre los ciudadanos de la capital, especialmente los fines de semana, y sobre todo en invierno, ya que cuenta con pistas de esquí (eso sí, muy sencillitas), y suele ser el primer sitio donde nieva en Hungría y el último donde desaparece el manto blanco. En general todos los montes Mátra son bastante turísticos, y junto a los Bükk (pero estos ya están algo más alejados de Budapest, entre Eger y Miskolc), los principales del país.
Desde que llegué a Hungría me puse entre ceja y ceja subir a Kekestető, al fin y al cabo procedo de una tierra donde el montañismo está muy arraigado, y aunque Hungría no es precisamente la meca del alpinismo, tiene sus pequeñas montañas y existe también afición por este deporte, aunque es mucho más minoritario.
Kékes es un monte de fácil ascensión, tiene múltiples senderos y caminos para hacerlo. En mi caso comenzamos desde Mátrafüred, a las afueras de Gyöngyös y a unos 350 metros de altura sobre el nivel del mar, por un camino muy agradable junto a un río, bajo un hayedo espectacular. Es la ruta que yo recomiendo, y consta de unos 8 kilómetros. La primera mitad es bastante suave, lo cual nos deja una segunda mitad bastante más cuesta arriba, hasta llegar al aparcamiento más alto, junto a la gigantesca antena de comunicaciones.
Fotos de la ascensión por el hayedo, desde Mátrafüred.
Desde el aparcamiento de la cima, apenas hay que andar unos metros más hasta llegar a la famosa piedra que indica que estás en el punto más alto de Hungría. Cerca de aquí hay un restaurante, donde una sopa caliente entra como anillo al dedo si el día es fresco (como cuando yo fui), y las pistas de esquí, abiertas en invierno.
Los caminos están perfectamente indicados a lo largo de la ascensión.
No obstante, el camino más sencillo es, en lugar de comenzar en Mátrafüred, continuar por la carretera hasta Mátraháza, a unos 700 metros de altitud. Al pasar el pueblo hay un pequeño parking donde terminan las pistas de esquí, por las que se puede subir fuera de temporada. Ascender desde aquí apenas nos lleva un rato (son unos 2 kilómetros) y es apto para todos los públicos, aunque no es tan bonito como ir por el hayedo, claro. En mi caso lo que hice fue bajar por aquí.
Pistas de esquí, otra opción más sencilla para subir.
Para los más perezosos, se puede ir en coche por carretera hasta arriba del todo (el parking de arriba es pago, como todos en Hungría), aunque se le quita todo el mérito. Claro que esta es la opción para cuando uno va a esquiar.
Para ir al monte Kékes en transporte público hay que tomar el autobús 1045, que sale de la estación junto al estadio Puskás Ferenc (Stadion austobusz palyaudvár), a la cual se puede llegar fácilmente con la línea 2 de metro (la roja) bajándose en la parada de Puskás Ferenc Stadion. El autobús tiene paradas en Gyöngyös, Mátrafüred, Mátraháza y luego continúa por más pueblos. Conviene madrugar un poco para aprovechar el día. Os dejo el horario aquí.