Los diabéticos siempre tienen que estar pendiente de su medicación y ser muy constantes y estrictos para no tener ningún imprevisto. Por ello, una insulina que sólo deba ponerse 3 veces a la semana es un gran avance para la comodidad y constancia en el tratamiento.
Cuando la diabetes tipo 2 (la que está asociada a malos hábitos como la obesidad) no se controla bien por medio de los fármacos, las inyecciones de insulina entran a formar parte de la vida de estos pacientes. Sin embargo, no todos cumplen a rajatabla con las pautas de tratamiento y no logran controlar bien sus niveles de azúcar. Disponer de una insulina que se pueda pinchar tres veces a la semana en lugar de diariamente podría mejorar esta situación.
Ése es el caso de degludec, un nuevo tipo de insulina inyectable aún en experimentación (cuya duración en el organismo puede llegar a prolongarse hasta 24 horas), que ha demostrado sus beneficios en un ensayo en fase 2 publicado por la revista ’The Lancet’.
Los investigadores, encabezados por Bernard Zinman, del Hospital Mount Sinai de Toronto (Canadá), evaluaron a 245 adultos entre 18 y 75 años,con diabetes tipo 2 que no había sido adecuadamente controlada mediante fármacos pero que nunca antes habían estado en tratamiento con insulina.
Los pacientes recibieron degludec (bien una vez al día o tres veces a la semana) u otro tipo de insulina de acción prolongada (glargina, comercializada como Lantus), que se debe inyectar todos los días antes de acostarse. En todos los grupos, la terapia se combinaba con metformina (un antidiabético oral).
Después de 16 semanas de estudio en 28 centros diferentes de Canadá, La India, Sudáfrica y EEUU, los investigadores observaron un buen control de la glucosa con tan sólo tres pinchazos semanales con degludec, una terapia que tampoco agravó su riesgo de hipoglucemia (es decir, de quedarse ‘cortos’ en los niveles de insulina en sangre) ni de efectos secundarios. Es decir, los resultados no mostraron diferencias entre quienes se pinchaban a diario y quienes lo hacían con menos frecuencia.
á un juego de sigilo en el que las sombras y la oscuridad será la mejor compañía que podemos tener.