La estrella se sometió a un doloroso tratamiento de belleza.“Amo intentar cualquier cosa que te haga sentir y ver joven”, explicó Kim Kardashian.¿A qué se refería?A un tratamiento de belleza conocido
informalmente como “Facial vampiro”. Consiste en sacar sangre del brazo
del paciente y luego con agujas más pequeñas rellenar la cara con varias
inyecciones.Y si piensan que eso suena doloroso, tan sólo vean la cara de la pobre Kim…