#Músicaparaelencierro. Siguiendo con la historia de la discografía crimsoniana, llegamos al final del listado (al menos con los discos de estudio) con un gran aporte de neckwringer. Un disco que se había publicado en el blog cabezón hacía añares por Mr. Juaco, esto si bien no es de ley un disco de King Crimson es un trabajo en conjunto de Robert Fripp, Jakko Jakszyk, Mel Collins, Tony Levin y Gavin Harrison, o sea, King Crimson sin ser King Crimson y firmando como un ProjeKct de King Crimson (uff, que mescolanza! y que rebuscado este enando gruñón), o sea, una sorpresa revestida de ProjeKct crimsoniano y que, en realidad, no, para nada, no es un disco de Crimson, pero como en todos lados, inclusive Progarchives, se cataloga al presente como un disco de King Crimson, no somos nadie para negarlo así que aquí entra dentro de los disquitos del Rey Carmesí, el último de la saga. Y aú no sabemos si el último, pero de seguro está entre los que integran el final de la añeja agrupación, y el futuro dirá como sigue esta historia revestida de color carmesí.
Artista: King Crimson ProjeKctÁlbum: A Scarcity of MiraclesAño: 2011Género: Eclectic ProgNacionalidad: Inglaterra
El siempre fijo en Crimson, el controvertido genio Robert Fripp deja a algunos de sus compañeros de lado y firma como un ProjeKct de King Crimson este disco llamado 'A Scarcity of Miracles', el cual ha contado con la siguiente banda: Robert Fripp (guitarras), Jakko Jakszyk (guitarras, teclados y voz), Mel Collins (saxos y flauta), Tony Levin (bajo y stick) y Gavin Harrison (batería).Aunque estos dos últimos sólo han participado para grabar las bases rítmicas del álbum, estamos ante una formación que consta de 3 de los últimos 5 integrantes de King Crimson, dejando fuera sólo a Adrian Belew y Pat Mastelotto. Además, Mel Collins ya fue un miembro de la banda en los años 70 y Jakko Jakszyk siempre ha estado ligado a proyectos musicales de Fripp, estuvo en la banda tributo de Crimson llamada 21st Century Schizoid Band y da la casualidad de que es el yerno de Michael Giles, uno de los fundadores de Crimson, y que creó junto a él esta formación de tributo junto a otros nombres ligados a KC tales como Ian McDonald, Peter Giles y el propio Mel Collins.
Hacía muchos, pero muchos años que Mel Collins no colaboraba con el Eterno Robert Fripp (sus últimas apariciones fueron In the wake of Poseidon, el extraordinario Earthbound y una pequeña aparición en el rockero Red) y es, finalmente, en pleno inicio del segundo decenio de éste siglo, en que se reencuentran en una forma por demás amigable, con la creación de un magnífico trabajo: A scarcity of miracles, un trabajo que reúne a músicos de espléndido nivel: Gavin Harrison (batería y percusiones), de reconocida trayectoria con Porcupine Tree, Tony Levin (bajo eléctrico y Chapman stick) el cual, honestamente, no necesita presentación, Jakko M. Jakszyk (guitarras eléctrica, acústica, vocales principales, Gu zheng y teclados), el excelente Mel Collins ( saxofón alto y soprano así como flauta) y su Señoría Robert Fripp (Guitarras eléctricas, efectos y paisajes sonoros). Es interesante mencionar el soberbio trabajo de Collins y la sorprendente versatilidad e inventiva de Jakko tanto vocal como en la guitarra y teclados, principalmente. Recordemos que él formó parte de un grupo ochentero de Rock-Pop llamado Level 42 sin mucha gloria y colaboró también en parte de la banda tributo 21st Century Schizoid Band al lado de Ian McDonald.
En éste encomiable trabajo encontramos un quinteto totalmente identificado con la propuesta musical de Fripp y Collins: pasajes sonoros, tipo Space, un uso discreto de la guitarra por parte de Fripp, sin encontrarnos con esos riffs esquizofrénicos y metaleros del 2003, de hecho, el trabajo frippiano parece ser muy parecido al que realizo con Brian Eno a principios de los 70´s y en la actualidad con David Sylvian, por otra parte, el trabajazo de Mel Collins en los sax es de primera, como dicen: “….como los viejos vinos, entre más ídem mejor,,,,”. Jakszyk ha sido una grata revelación en la voz: versátil y adaptable a las circunstancias musicales. La sección rítmica cumpliendo excelsamente, destacándose cuando son requeridos. En sí, la música es un mezcla perfectamente lograda entre los pasajes sonoros de Fripp, la excelsa voz de Jakko y la fuerte tendencia jazzística de Collins, lo que entretejen un pasmoso recurso musical. Por otra parte, las 4 primeras melodías forman un conjunto de enorme unidad y versatilidad musical por el quinteto, las 2 últimas, principalmente la quinta, son de fuerte influencia crimsoniana.
´Scaricity of miracles´, track de inicio, parte de una tenue atmósfera dada por los paisajes sonoros de Fripp y la guitarra en discretos arpegios, distantes, tenues de Jakko. A los 1:39, entra el quinteto, destacándose los finos arpegios de sax acompañándose de la acústica de éste el cual también interpreta la melodía con elegante y reflexiva voz, cambio precedido por escala de sax, para continuarse con un breve puente del mismo, con esa envolvente, tranquila, atmósfera melódica, conjugada ésta por los pasajes sonoros y el excelente manejo de Collins, la acústica parte como fondo, a los 5:02 cambio a un elegante entretejido de acordes de eléctrica y entrada de la voz, el juego de acordes y arpegios de sax es espléndido al final del track. ´The price we pay´, inicia con pristínos arpegios de Gu-zheng de parte de Jakko, a los 0:50 entrada de su voz que se desplaza hacia la integración del grupo en una evidente directriz rockera con el sax de por medio, continuación de un paisaje sonoro que se continúa con arpegios de eléctrica de Jakko, con toda la esencia del buen Rock. A los 3:18, nueva entrada de Collins, dirigiéndose a una evidente tendencia Jazz que engloba al quinteto, se escucha un breve paisaje sonoro frippiano al final.´Secrets´, se rodea de una atmósfera misteriosa, con un pasaje sónico de tipo Space, la voz de Jakko se escucha expresiva, meditativa y al fondo, Collins, con envolventes acordes de sax y, en su momento, se escucha la eléctrica de Fripp, a los 3:31, un breve pasaje de acústica para que segundos después entre la compacta sección rítmica, en un envolvente pasaje, destacándose Levin. La atmósfera continúa siendo misteriosa, obscura por momentos. A partir de los 5:39, el sax lleva la batuta de la pieza interpretado con verdadera maestría, hasta el final.´This house´, en parte, parecida a la anterior, dada la melancolía que manifiesta así como el paisaje sonoro de Fripp que maneja a lo largo del track, inicio con dicho recurso musical y voces distantes, que casi a los 2 minutos, deja entrever el destello del mágico Collins, la voz del cantante se torna también melancólica haciéndose acompañar de teclado que despliega sinfonismo, ayudado por la eléctrica y el tan mencionado sax, a los 4:11, se incorpora el grupo, destacándose Collins con su amplio despliegue interpretativo, haciéndose acompañar de discretos arpegios eléctricos de Fripp, momento en el que se retoma esa atmósfera llena de melancolía, es deber señalar el magnífico trabajo de Levin en el track, discreto pero muy preciso con el contrapunteo. A los 6;33, un cambio de rítmico en donde prevalece la interpretación de Collins y las voces distantes, compaginados con el grupo, destacándose la eléctrica de Fripp,´The other man´, es una de las mejores piezas del disco. Suaves acordes de eléctrica y sax que preludian la entrada de evidente influencia crimsoniana tanto en la voz como en la estructura misma de la melodía, magnífico trabajo de Levin en el contrapunteo junto con excelente juego vocal de Jakko. Hacia los 2:43, pasaje sonoro que antecede a la entrada del grupo con un Harrison agresivo ante los tambores y de directriz 100% carmesí, el sax, discretamente neurotizante, con cambios y variaciones, por momentos, Fripp recurriendo a algún riff. Un track propio del Rey Cramesí. De excelente manufactura.´The ligth of day´, es un interesantísimo corte de tipo experimental, distantes acordes de eléctrica y teclado entre Fripp y Jakko, a los 2:15 hacen su aparición las vocalizaciones con cierta tendencia narrativa, junto al acompañamiento de Collins y los pasajes sónicos de Fripp, de deja escuchar un discreto sinfonismo. En el track, hallamos múltples cambios y variaciones en la esencia musical del mismo, sin embargo, la vocalización continúa bajo la tendencia anteriormente citada, al final se agregan arpegios de eléctrica y el sax da su toque final junto con el sinfonismo de Fripp.
Un disco que es un agasajo escuchar, ojala se inicie una época en que las viejas rencillas entre Fripp y Collins sean olvidadas y se conjunten estos enormes talentos para ofrecernos música de alto nivel como es A scaricity of miracles.
Gran producción de Fripp y Jakszyk.
Excelente.
Ralp58 En el 2011 llegó, envuelto de misterio y poca información previa este "A Scarcity of Miracles", que fue todo un misterio para los fans de Crimson. ¿Se le puede considerar realmente un disco de la banda? El caso es que pese a que la firma corresponde sólo para Robert Fripp, Jakko Jackszyk y Mel Collins, un letrero advierte en la portada del álbum que se trata de "A King Crimson Projekct".La escueta nota de prensa que se ha ofrecido a los medios y al público en general, indicando cómo comprar el álbum, cuenta que es "una colección de piezas muy cuidadas y llenas de matices, pero accesibles y directas" en la que este terceto musical se acompaña de Tony Levin y Gavin Harrison para las bases rítmicas, con "momentos íntimos, épicos". A decir verdad, no se trata de música puramente crimsoniana, sino más propia de las cosas que había grabado Fripp con otros colaboradoresRobert Fripp ha dicho del disco que es "uno de mis discos favoritos de aquellos en los que aparezco como una pieza fundamental; tiene el gen de Crimson, pero no es muy KC". Quizá con esta afirmación terminamos de confirmar nuestras sospechas, aunque también podría tratarse de un intento por rebajar las expectativas, que eran muy altas tras 8 años de silencio discográfico de Crimson.
En sus ya célebres diarios, Fripp dejó claro a finales de 2010, tras unas declaraciones de Adrian Belew alentando una reunión del grupo, que no había futuro próximo para King Crimson, que siempre vivió temporadas de inactividad largas, en todas sus décadas de vida.Recordemos que en los 70, Fripp disolvió al Rey Carmesí tras el álbum "Red", en 1974. En los 80, más de lo mismo tras "Three of a Perfect Pair" en 1984. En los 90, tras "Thrak" (1995). Después, llegó el lío de la fraktalización: el grupo se reunía ocasionalmente y en esas reuniones realizaban música de improvisación bajo el nombre de "ProjeKcts". En la década de los 2000, otra vez hubo un final con el álbum "The Power to Believe" (2003) y luego ha venido el grupo de las tres baterías para las tocadas en vivo a través de todo el mundo. Pero antes de esto último se registró este disquito...
Hay leyes consabidas e inmutables en el mundillo del rock progresivo. Una de ellas es que King Crimson y Robert Fripp van por libre y que siempre serán un grupo y un artista de culto, respectivamente, hagan lo que hagan. Apenas se les discute una vez que se les ama y es lo que sucede con los mil y un proyectos musicales de Fripp y su entorno crimsoniano. Por esa razón, este disco junto a Jakko Jakszyk y Mel Collins, rodeándose de Tony Levin y Gavin Harrison, que tanto a sonado al gran público como en realidad un cuasi-álbum de Crimson, sólo gustará a los fans más fieles. Pero ojo, que si hay un público crítico y duro con sus ídolos musicales es el progresivo. De todos modos, aquí está este 'A Scarcity of Miracles', toda una sorpresa revestida de ProjeKct crimsoniano y que, en realidad, no, para nada, no es un disco de Crimson.
Primero, un poco de historia y datos en torno a este álbum. El nuevo proyecto de Fripp con Jakko Jakszyk y Mel Collins fue anunciado apenas sin bombo y platillo pero en seguida cobró muchas relevancia entre la comunidad progresiva y, más en concreto, la crimsoniana. No es de extrañar, puesto que tras 8 años de silencio y dar casi por muerto a la banda por parte de Robert Fripp, muchos se habían hecho a la idea de que jamás se saborearía nada nuevo de ellos. La gira del 40º aniversario fue una decepción para sus fans, puesto que sólo contó con un puñado de conciertos en Estados Unidos, con una buenísima pero poco representativa formación de Crimson tras cuatro décadas de música e historia.
Sin embargo, esa mini-gira de 2009 alucinó a sus fans porque contar con Gavin Harrison en la batería en sustitución de Pat Mastelotto atrajo a nuevos públicos, ya que éste se ha erigido en los últimos tiempos en uno de los baterías más valorados en el rock. Pero más allá de ello, este 'A Scarcity of Miracles' ha sido durante la larga espera por escuchar y conocer su contenido la gran esperanza para volver a renacer de sus cenizas algún día al grupo. Hay que recordar que desde los años 1990, Fripp vio imposible la reunión del por entonces doble trío y apostó por reunirse en pequeñas formaciones llamadas ProjeKcts, y que en realidad eran mini-reuniones del grupo oficial. Después, tras algunos notables trabajos, siempre experimentales, basados en la improvisación musical y de tipo instrumental, llegaron en 2000 y 2003 dos álbumes oficiales de la banda, 'The ConstruKction of Light' y 'The Power To Believe', respectivamente, y con ellos, la gran esperanza de que jamás muriera el gran mito crimsoniano. Pero tras la gira del último disco Fripp se tomó tal descanso que sólo rompió en agosto de 2009, con motivo de la celebración de 40º aniversario.
Después de eso, y tras un desalentador comunicado de Fripp, dando a entender que ya era complicado rescatar el grupo como tal, y que no tenía coherencia creativa, artísticamente hablando, se anunció en abril la salida de este nuevo trabajo como ProjeKct. Esta vez los integrantes serían nuevos, con Jakko Jakszyk y Mel Collins como principales socios creativos. Pero no se quedaba ahí la cosa: también entraban en la formación Tony Levin y Gavin Harrison. El bajista fue un destacado integrante de Crimson durante los 1980 y 90, mientras que Harrison fue el fichaje sorpresa para la citada mini-gira de 2009. Mel Collins es más conocido por todos, ya que fue integrante de Crimson también en los 1970, pero Jakszyk no. El multiinstrumentista de impronunciable apellido, miembro del supergrupo The Tangent, siempre ha estado ligado al mundo crimsoniano. Estuvo en la banda tributo de Crimson llamada 21st Century Schizoid Band y es yerno de Michael Giles, uno de los fundadores de Crimson.
Pero no, no son King Crimson y este disco jamás debería ser considerado como algo propio de Crimson. Tiene su cosas evidentemente crimsonianas, porque con Fripp dentro y formando parte de él, siempre tendrá un aroma. Pero aunque huela a Crimson, no es Crimson. Que quede claro.Así que, hablando ya del contenido de 'A Scarcity of Miracles', hay que remitirse a la nota de prensa que estos chicos ofrecieron hace unos meses, comentando que el álbum sería "una colección de piezas muy cuidadas y llenas de matices, pero accesibles y directas" y que contendría "momentos íntimos, épicos". Robert Fripp dijo de él que es "uno de mis discos favoritos de aquellos en los que aparezco como una pieza fundamental; tiene el gen de Crimson, pero no es muy KC". Pero insisto, no se trata de música puramente crimsoniana, sino más propia de las cosas que últimamente había grabado Fripp con otros colaboradores.
Lo que más puede despistar es escuchar el inicio del álbum, con canciones muy semejantes al estilo de siempre, y con una voz de Jakko Jakszyk que recuerda muchísimo a la de Adrian Belew, el gran ausente junto a Mastelotto en este álbum, dando por perdido ya al buen músico que era también Trey Gunn. El tema que abre el álbum, titulada como éste, es fácil de encasillarla en el sonido de los Crimson más recientes. En cosas se parece a los Crimson de los 1990, con discos como 'Thrak', pero sobre todo a lo que venía haciendo Fripp con sus últimos trabajos de soundscapes, y ciertos matices de los dos discos de los años 2000, 'The ConstruKction of Light' y 'The Power To Believe'.
Aún así, la única diferencia y la nota de color la da el saxo de Collins, ya que por lo demás es una pura imitación al sonido de siempre, sobre todo porque Harrison se limita a copiar la percusión de los tiempos de Pat Mastelotto y Levin, a los de Trey Gunn. Muchos podréis recordar con él temas como 'Walking on Air' o 'One Time', ambos sumamente tranquilos, de ritmo lento y muy profundos. También suenan mucho a 'Eyes Wide Open' y algunas de las varias partes de 'The Power to Believe' y a 'Heaven and Earth' de ProjeKct X, incuida en 'The ConstruKction of Light'. Las cadencias rítmicas son incluso calcadas.
Fripp, Jackszyk & Collins; A King Crimson Projekct - A Scarcity of MiraclesPartiendo de que es un gran tema, tampoco entusiasmará a los no fanáticos y no creará nuevos seguidores. Eso desde luego. 'The Price We Pay', segunda pieza, comienza con aroma oriental, que tanto gustó siempre a Fripp. Una canción con alma 'zen' y que pronto se torna en cosas reconocibles en los últimos discos por los elementos antes comentados. Otra vez la nota de color la ponen los saxos soul de Collins y los soundscapes de Fripp, muy conseguidos y frescos. Lo que llama la atención a kilómetros es que Harrison parece haber sido obligado a imitar a Mastelotto o bien a seguir los dictados de Fripp, sin darle espacio para desplegar su estilo propio. Los ritmos son calmados y lentos, por lo que nadie espere temas desgarrados, rock enérgico y progresivo puro.
'Secrets' baja aún más el ritmo, con unos saxos que te trasladan a un mundo onírico para la meditación. Aquí Jakszyk hace un gran trabajo vocal como primera y subidísima línea musical, sonando por encima de todo el resto del grupo, donde la labor de producción es sencillamente exquisita. También son muy buenas las interpretaciones a las guitarras de éste y de Fripp, aunque todo ello exige del oyente una atención plena y ausencia de cansancio y sueño. No es una crítica: es una realidad. Es el típico disco que relaja tanto que puede llevarte al mundo de Morfeo en cuestión de minutos.
'This House' es pura experimentación, con alma de soundscape frippiana, coros algo molestos en ocasiones, dando la réplica a las capas atmosféricos de teclados. Al final sonará, como ocurría con 'A Scarcity of Miracles', a canciones antes mencionadas como 'Heaven And Earth', del ProjeKct X. Ya casi acabando (el disco dura tan sólo unos 43 minutos) disfrutamos de algo más intenso con 'The Other Man', sin duda lo más crimsoniano de todo el álbum, recordando a los trabajos de los últimos años 90 y principios de la pasada década. En el minuto 2'35'' incluso se podrá reconocer el riff del tema 'The ConstruKction of Light'. Después, los juegos vocales de Jakszyk y los cambios de ritmo hacen pensar inevitablemente en Belew. También podemos disfrutar más que nunca de Gavin, con unas excelente ejecución de percusión.
El cierre, 'The Light Of Day', que arranca con un solo de soundscapes de Fripp, al puro estilo de sus discos en solitario, acaba siendo un cansino juego de intercambios de turnos: primero la voz, luego el saxo de Collins, luego un solo de guitarra... ambiente épico y espiritual para un final poco agraciado para el álbum.
Al final la conclusión de este 'A Scarcity of Miracles' es que, sin llegar a ser un disco como los que Fripp ha sacado últimamente, como la colaboración con Theo Travis (infumable, bajo mi criterio), se deja notar y está por encima de lo que hace años habríamos esperado de un proyecto crimsoniano. Pero dejará sin duda un sabor de boca insuficiente a los más fieles al alma salvaje de ese gran grupo mítico que es King Crimson. Eso sí: maravillosas interpretaciones, calidad a raudales y coherencia de sus integrantes. Bonito regalo, sin más, para los ávidos de material crimsoniano.
Puntuación: 7/10
Pablo M. Beleña
Lista de Temas:1. A Scarcity Of Miracles (7.27) 2. The Price We Pay (4.49) 3. Secrets (7.48) 4. This House (8.37) 5. The Other Man (5.59) 6. The Light Of Day (9.02) Alineación:Robert Fripp - Guitars, Soundscapes Mel Collins - Alto & Soprano Saxophones, Flute Jakko M Jakszyk - Guitars, Vocals, Gu Zheng, Keyboards Tony Levin - Bass & Chapman Stick Gavin Harrison - Drums & Percussion