Kingsman: Servicio Secreto – Estreno destacado

Vale, no estaba incluida en mis estrenos destacados del primer trimestre de 2015, pero me dejáis rectificar ¿verdad?

Cuando hice esa entrada resumen, en muchas de las fuentes que leía estaba incluida Kingsman, pero me pareció que era simplemente otra película de “adolescente malo convertido a espía”. No hay nada mas que leer la sinopsis oficial: la película sigue a un delincuente adolescente en Londres que será entrenado por su tío, un veterano agente retirado del MI6, ayudándole a convertirse en uno de los espías más importantes del país. Después de pasar un durisimo programa de entrenamiento, descubre un plan diabólico para destruir medio mundo

¿Y el motivo del cambio de opinión? Pues toda una serie de opiniones positivas de la gente que estaba asistiendo a los preestrenos y pases de prensa (gente de las que mas o menos me fío, no de todos). Casi todos coinciden en que, a pesar de lo estereotipado del planteamiento y de los personajes, el resultado final es francamente divertido.

Kingsman es algo así como un homenaje gamberro a las películas de James Bond

A eso ayuda una correcta elección de protagonistas. Hay unos cuantos secundarios como Michael Caine que siempre dan calidad a una película, pero es el trío protagonista el que da muy bien el nivel, cada uno es su papel: el casi desconocido Taron Egerton (durante algún tiempo rumoreado como el nuevo Spiderman) se adecua muy bien a papel de chico de la calle que se convierte a espía y Samuel L. Jackson es el malo malísimo, a pesar de la  discutible elección de su manera de hablar. Pero el que esta genial en su papel es de espía veterano es Colin Firth. Tiene esa imagen de “caballero ingles” que tenemos bastante idealizada y que hemos visto en muchas películas y series (imposible no pensar en Los Vengadores, la serie de los 60, nada que ver con Marvel).

Gran parte de la “culpa” del buen nivel de Kingsman la tiene también su director, Matthew Vaughn, que una vez mas hace gala de las cualidades que ya nos mostró en Kick-Ass o X-Men: Primera Generación, como son los cambios de tono en el guión (del que también forma parte como autor) y unas secuencias de acción que muestran claramente violencia pero sin llegar a ser desagradables (mas bien es caricaturesca).

Kingsman es a las películas de espías lo que Kick-Ass era a las películas de superhéroes.

Venga, no me enrollo mas y os dejo con el tráiler

Un saludo