Revista Viajes

Kirguistán: el mercado de animales de malbazaar

Por Merche_62

Por la mañana contratamos un taxi desde el hotel para que nos lleve al mercado de ganado que hay cercano en Osh, el Malbazaar. 

KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAARSe encuentra a unos 12 km y nos lo han recomendado, sobre todo porque coincide que hoy, al ser domingo,  es el único día de la semana que podemos ver a multitud de ganaderos  que llegan de distintas zonas del país para subastar su ganado.
KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR

Una vez allí, nos acercamos donde se encuentra el barullo de gente. Vemos a lo lejos comerciantes  que acaban de comprar alguna vaca o cordero. Otros suben los animales a la furgoneta, algunos esperan pacientemente a que alguien se acerque y se interese por sus animales.

KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR

Algunos de los ganaderos  retienen con una sola mano con cuerdas a 9 o 10 ovejas y son enormes, con su inmensa lana. Parece ser que por aquí no se acercan los turistas por lo tanto, nos alegramos.

KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR

De repente, ya metidos de lleno entre los animales del recinto uno de los toros se desboca y el dueño apenas puede retenerlo así que hay estampida y echamos a correr. Una de las ovejas me pisa y me quita el zapato de deporte saliendo disparado. 

KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR

Salgo del barullo y recupero mi calzado, menos mal que fue una oveja la que me pisó con su pezuña pues si llega a ser una vaca lo llevo claro, pues los animales al ver este toro tan salvaje que se les echaba encima se apartaban a pesar de que los dueños intentaban retenerlos fuertemente sin perder el temple evitando causar un desastre.

KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR

Había un cerco vallado donde los hombres (pues no hay ni una mujer) negocian los precios de los animales, otros pagan, cuentan el dinero y se dan un abrazo una vez hecho el trato. 


KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR


Son hombres que dedican casi toda su vida a este trabajo. Después echan un trago entre amigos y una vez acabada la faena, para sus casas.

KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR

Nos encontramos en la sección de cabras y uno de los macho cabríos se dedica a montar las lindas cabritas. Los hombres al verme venir se sonríen contemplando la escena y señalan hacia los animales. 

KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR


Yo en broma hago el ademán de hacer una foto a las cabras con mi cámara y les digo a ellos “porno, porno” a lo que se empiezan a reír como locos, ahora si de verdad.   


KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR

Los corderos permanecen junto a sus dueños pero en casi todo el recinto hay que ir sorteando las heces pues el lugar (un gran descampado) se encuentra a rebosar al haber tantos animales. Una vaca por allí defecando a la espera de su nuevo dueños me mira  vigilando que no me acerque demasiado.

KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR

KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR

Unos animales esperan tranquilos, asustados o resignados, y es que en los ojos de la mayoría de los animales podemos ver plasmados sus sentimientos, al igual que en las personas.

KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR


KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR

Un caballo que se encuentra solo y atado me mira al verme, desconfía, se pone de lado, receloso, al ver que me acerco se da la vuelta y me alejo porque creo que está preparando la patada, pues creo le estaba importunando con la cámara sin darme cuenta.


KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR

Un señor se brinda para que le haga una fotografía, al acercarme noto que va algo bebido pero sonríe poniendo una cara simpática. A pesar de que en estos países fríos la gente bebe mucho, la mayoría de kirguises suelen ser amable y sonriente. 


KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR

Algunos hombres van ataviados con el kalpak, el típico sombrero kirguís. Le pregunto a uno de ellos si puede hacerse una foto con mi marido a lo que accede gustosamente pues va relajado y sonríe. 

KIRGUISTÁN: EL MERCADO DE ANIMALES DE MALBAZAAR

   Francesc posa junto a él y finalmente se dan la mano y nos hace la pregunta típica de que país somos.



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