Marina, la cantante de K&K, se queja porque la gente que va a sus conciertos le critican y le dicen que no se le oye/entiende cuando canta (¿es la nueva Jota?), les entiendo, a mí me ha pasado lo mismo, y sólo escuchando el disco. Aunque he de decir que no había prestado mucha atención a este grupo, tienen su aquel, (me encantó la versión que hicieron de Ritmo de la noche).
En Tierra, trágalos, se ve su dream pop a leguas, pero una vez más hacen gala de su ECLECTISMO MÁXIMO. Entre todas las canciones se puede ver desde bossa-nova como en Deja el odio para después de comer (con discurso político incluído), toques muy italo-disco 70s en Forma, sentido y realidad; el country - folk de Carne de Bakunin ( Adiós al capital, creo que me voy a quitar, qué perla), un bizarrismo extremo en El Rey del Mambo y la Reina de Saba, una canción que parece un bolero/ranchera/copla/pasodoble (?). Vamos que seguro que no te aburres.
Hay canciones pop pop pop como Eres un sinvergüenza (muy pinchable) y especial mención a Mama, no quiero ir al colegio con su banjo y harmonica correspondiente, con temática muy generación ni-ni. En El fin del mundo, cascabeleando, me recuerda un poco a un She and Him edulcorado con esos toques Hawaï, referenciando claramente también a La buena vida más intimista.
Sin duda, es un disco de segunda escucha necesaria.
Mañana viernes, 9 de abril, tocan en la [2] de Apolo. Aún no hay video de ninguna canción del nuevo disco, aquí una actuación en el ecopop '09.