Son muchos mis compañeros y amigos que a día de hoy tienen una licencia de piloto comercial en el bolsillo...y ahí está, en el bolsillo.
Si de algo me he dado cuenta en los años en los que llevo en este mundillo aeronáutico, es de que la actitud es fundamental para avanzar, para moverse, para evolucionar y para conseguir los objetivos. Pero ya no sólo en la aviación, si no también en la vida. Buscar un trabajo, puede llegar a convertirse en el peor de los trabajos, no estar atado a un horario ni a unas funciones puede desencadenar en dos cosas, estar tirado en el sofá, o por el contrario, no parar en todo el día. Yo he pasado por ambas fases. Las dos son casi igual de peligrosas.
Por supuesto, hay que tener claro que no hacer nada, no soluciona nada.
Buscar contactos, moverse, y desenvolverse en el entorno es tan útil e importante como saber aterrizar un avión.
Lo primero que debes hacer es conocerte a ti mismo y humildemente, buscar tus virtudes y cualidades y tus defectos. No es fácil.
No todo el mundo vale para aerolínea, ni para instrucción, ni para ejecutiva, ni para extinción de incendios, ni para ambulancia. Inicialmente puedes caer en la tentación de cometer el error de pensar que... "Tú vales para todo", pues no vayas por ahí, porque te anticipo que estás equivocad@.
Decidí hacerme instructor porque vi que tenía facultades para comunicar, y transmitir mis conocimientos. Ya antes había dado clases a niños de natación y lo cierto es que enseñar, me gusta. Pero ser instructor, no es fácil, igual que no lo es extinguir incendios, pero yo de eso, no entiendo.
De las primeras cosas que descubrí al comenzar el curso de instructor, es que un instructor de vuelo no está ahí para volar el avión, es más, no debe tocar los mandos de vuelo salvo para evitar un accidente. ¿Y entonces qué hace un instructor? Un instructor trabaja fundamentalmente con la psicopedagogía...cosa que ningún piloto estudia en su formación normal, pero a eso se dedica un instructor, a guiar a su alumno y hacer que se sienta cómodo volando y aprendiendo a volar.
Es curioso e incluso divertido escuchar a compañeros que andan inmersos en la formación y escuchar las dudas que tú mismo formulabas años atrás. Todos pasamos por lo mismo, pero no todos reaccionamos ni somos iguales. Otro de los factores importantes de un piloto es la superación del estancamiento y la frustración. "Nunca estarás solo", bonito eslogan, pero en tu formación como piloto, especialmente modular, tendrás momentos en los que estarás más solo que la una. Sobreponerse a esos momentos y salir airoso de ellos también es pieza clave.
Y para terminar, vuelvo a hablar de esa actitud, de ese sexto sentido que lleva a los pilotos al éxito o al fracaso. Al éxito, o al fracaso en tu profesión, sea la que sea.
Buenos y exitosos vuelos!