Lo dice la Asociación Empresarial Eólica (AEE), que ha inaugurado hoy su Convención anual en Madrid. Según la AEE, "desde principios de año, se han destruido 25 empleos eólicos al día, lo que supone un total de 3.600 puestos de trabajo perdidos; se han cerrado nueve fábricas y otras tres se encuentran en fase de suspensión de actividad". Estas cifras son "consecuencia directa" -ha dicho el presidente de la gran patronal eólica, José López-Tafall- "de las medidas tomadas por el Gobierno este año contra el déficit de tarifa: el impuesto del 7% sobre la generación y el Real Decreto-Ley 2/2013, que ha supuesto un recorte de facto de la retribución".
El presidente de la AEE, José López-Tafall, ha inaugurado hoy en Madrid la Convención Eólica 2013con un discurso muy duro en el que ha señalado al gobierno de la nación como responsable directo del descalabro que está sufriendo el sector en lo que va de año. La AEE espera un impacto en sus cuentas de unos 6.000 millones hasta 2020 como consecuencia de las medidas aprobadas por el Ejecutivo Rajoy. López-Tafall ha dicho, además, que el sector que representa "no es culpable del déficit de tarifa", que ha crecido "siempre de acuerdo a los objetivos y costes que le ha marcado el regulador" y que "los incentivos eólicos españoles están entre los más bajos de Europa (sólo los de Suecia, Dinamarca e Irlanda, países con mucho mayor recurso eólico, son inferiores)". Más aún: según Tafall, "en 2012, el sector, generó el 17% de la electricidad consumida en España y su retribución total representó tan sólo el 11% de los costes totales del sistema”.El ahorro en combustibles fósiles
En el otro lado de la balanza, el presidente de la AEE ha expuesto "lo que hace cada día la eólica por España”. En ese capítulo, López-Tafall se ha referido a los "ahorros en importaciones de combustibles fósiles, por valor de 1.700 millones de euros, lo que ha permitido a la eólica contribuir al primer superávit comercial de la historia de nuestro país”; ha mencionado asimismo que su tecnología ha evitado la emisión de "doce millones de toneladas de CO2, por valor de 47,5 millones de euros"; y ha señalado, por fin, que "el precio del mercado eléctrico se ha reducido en 11,5 euros respecto al año anterior, con el consiguiente ahorro de 684 millones en la factura de las grandes empresas industriales, además de proporcionar la posibilidad de bajar el precio de la luz a los consumidores". Pues bien, a pesar de todo ello, ha dicho, “el sector eólico ha sido castigado con tal dureza que parece que somos los responsables del déficit de tarifa”.La eólica ya ha pagado su parte de la factura
El máximo dirigente de la gran patronal eólica ha explicado por otra parte que “no podemos pagar los errores de otros, como no podemos seguir pagando casi en exclusiva el ajuste del sector. Si el Gobierno entiende este mensaje, habrá futuro; si esto se entiende, la eólica puede aún dar muchas satisfacciones a España. Con un sector más equilibrado, abierto a la competencia y con la seguridad jurídica recuperada, la eólica tiene mucho que ofrecer”. Así, López-Tafall ha pedido al Gobierno que estas medidas sean de carácter temporal y ligadas a la recuperación de la demanda eléctrica, así como que la pérdida de ingresos –de 600 millones de euros sólo en 2013- se compense: “pedimos al Gobierno que reconozca que la eólica, tras el RDL 2/2013, ya ha pagado su parte de la factura, y que, tras la próxima reforma energética, elabore un plan específico de apoyo al sector, que permita mantener el empleo industrial y aumentar la presencia internacional".
"¿De verdad queréis tirarlo todo por la borda por dificultades de corto plazo?"
Tras López-Tafall, ha intervenido en la Convención Eólica 2013 Andrew Garrad, presidente de la European Wind Energy Association (representante de la patronal europea). Según Garrad, que ha afirmado que los logros de la eólica en nuestro país han sido “espectaculares”, la situación regulatoria que vive España preocupa en Europa: “en este sector, España ha sido un faro para el resto del mundo y el Gobierno español debe preguntarse si quiere seguir siendo un líder eólico en el futuro, si quiere ser parte de una industria que gasta dos veces más en I+D que el resto, y si quiere tener parte de los 800.000 empleos que habrá en la UE en 2030”. El presidente de EWEA ha concluido su intervención planteando una pregunta: “otros gobiernos querrían todo eso, pero no tienen ni la industria, ni la experiencia que tiene España en integración en red. ¿De verdad queréis tirarlo todo por la borda por dificultades de corto plazo?”. EWEA defiende que la Unión Europea debería fijar objetivos vinculantes de consumo de energías renovables de cara a 2030 (en la actualidad, los que hay son a 2020) y apuesta por marcos regulatorios estables. [En la imagen, a la izquierda, Garrad; a su lado, Tafall].