Seguramente a estas alturas del día ya habréis visto suficientes post sobre la alfombra roja de los Emmy, pero como mi ritmo vital va como 24 horas retrasado con la actualidad mundial, vais a permitirme que publique ahora el mío, sobre todo porque viendo las fotos parece que hay mucha tela que cortar.
Tela que cortar y tela que romper, porque a Sofia Vergara se le estalló su Zuhair Mura 20 minutos antes de ganar el premio a la mejor serie, y se quedó con el culo al aire, literalmente. Palabras mayores es lo de Cristina Hendricks, que me parece genial su rollo de representar la mujer con curvas y tal, pero el escote de su Christian Siriano roza lo Pamela Anderson en los tiempos Tommy Lee.
Dos de las ganadoras de la noche fueron Julianne Moore y Claire Danes. Y he de decir que ninguna de las dos me gusta. La primera parece una figurita de la Bella con ese Dior de Alta Costura; y el Lanvin de Claire le queda raruno en la cintura, parece que lo lleva recogido tipo túnica de nazareno. Más que el amarillo en si ha sido el corte de los vestidos.
Una de las más alabadas ha sido Lena Headey (derecha) de Giorgio Armani. Aunque el momento sobre cuerpo de la actriz de Juego de Tronos puede parecer un tanto pantojil, es de las que mejor escapó de esta alfombra roja. El Marchesa de Hayden Panettiere es un poco raruno, parece que va medio a envolver.
Mis amigas de TheG Good Wife, guapisimas: Julianne Marguiles, menos espectacular que otras veces, de Valli (ella si que sabe). Archie Panjabi, de Randi Rahm, más normalita pero muy guapa. Por ciero que el marío/pareja/lo que sea de la Marguiles se merece un ayomáquerico
En el montón de las sosunas, Emily VanCamp (Revenge) de J.Mendel, y Amanda Peet de no se sabe quien (pero muy 1998)
Más originales Leslie Mann, de Naeem Khan (y joyas en turquesa) y Emilia Clarke (Juego de Tronos) de Chanel
De originales se pasaron Elisabeth Moss (Mad Men) con un rubio tan platino que le hacía muy mala carita y un momento mamachicho que no venía al caso (por muy Dolce&Gabbana que sea), y Ginnifer Goodwin (Erase una vez), que con la carita de pazguata que pone posando no le hizo mucho favor al Monique Lhuillier nranja en contraste (y dicho sea de paso, el color no le iba mucho).
Por tonos menta-celeste apostaron Heidi Klum (muy normalita) de Alexandre Vauthier y nuesta amiga Zooey Chanel, pelín empalagosa de Reem Akra, pero ella es así de cargante en ella misma.
Para olvidar, el Prada de Lena Dunham y el Carolina Herrera de Ashley Judd. La primera, porque con ese corte de pelo y ese corte de vestido, lo más probable es que ter