Con estas declaraciones no solo se intenta discriminar al sector homosexual una vez más, sino que se da a entender que la humanidad debe protegerse o paliar esta “amenaza”, para poder asegurar su continuidad en el tiempo por los siglos de los siglos. AMÉN.
Investigando por la red, he dado con una estadística de la obra: “La vida sexual del clero” (Pepe Rodríguez – Ediciones B) donde se publican los siguientes datos textualmente:
HÁBITOS AFECTIVO-SEXUALES DEL CLERO
(Sacerdotes en activo (datos sobre 100) Año: 1995
- Masturbación: 95 de cada 100.
- Relaciones sexuales: 60 de cada 100.
- “Sobar” a menores: 26 de cada 100.
- Práctica homosexual: 20 de cada 100.
- Homosexualidad: 12 de cada 100.
- Abusos graves a menores: 7 de cada 100.
Estos datos pertenecen a 1995. Habiendo aumentado la población tanto española como mundial, obviamente estos datos serán mayores. Argumentando estos datos, no creo que sea moral o lógico atacar un sector que siente y padece al igual que el cristiano, el ateo, el musulmán o el hare krishna, , cuando ellos mismos recogen (ya sean muchas o pocas) cifras sobre prácticas sexuales legales e ilegales, moral o penalmente. (Casos de abuso sexual eclesiástico).
Tachar la homosexualidad de amenaza, son palabras mayores. Además de su enriquecimiento y el sometimiento de los inocentes a un Dios más que probable inexistente, el pontífice tiene como misión predicar la paz, y no hacer apología al odio ni a la discriminación, y menos aún a personas que son juzgadas tan solo por sus sentimientos y su orientación sexual.
Estamos hablando de una persona que se hace llamar “el elegido” como si de Matrix se tratara, para predicar la palabra de Dios: la paz, la bondad, compartir, y todos esos valores (algunos buenos y otros no (como el de no Matar)), cuando él mismo incumplió en su juventud en la guerra en el bando Nazi, el principal Derecho Humano: el derecho a la vida.
En conclusión creo que todo sería mejor, si los Gobiernos rompiesen sus relaciones con esta anomalía que responde al nombre de Vaticano, y cuyos valores predicables encubiertos no son otros que el machismo, la discriminación, el abuso de poder y el fascismo. Claro es que a los Gobiernos no les interesan romper dichas relaciones con la empresa más antigua del Universo.
Dani Ruiz - Sígueme en Twitter: @daruiz03