Revista Política
La anti renta de ciudadanía de "Ciudadanos": ¡Vivan las caenas!
Publicado el 18 febrero 2015 por CiveperezEl Complemento Salarial Anual Garantizado, que propone el partido político Ciudadanos, perpetuaría la situación de dominio de los empleadores sobre los trabajadores precarios. Con cargo al dinero de todos. Quien pretenda dignificar el trabajo asalariado tiene una vía mucho más sencilla que inventar la pólvora: asegurar un Salario Mínimo Interprofesional digno. Quien pretenda aumentar la libertad real de la gente, haría bien en dejarse de tonterías y defender
la Renta Básica de Ciudadanía en lugar de las cadenas del trabajo precario.
Ante el declive de la derecha brutal y casposa representada por el Partido Popular, cuya ministra de Empleo invoca a la Virgen del Rocío a ver si ésta se digna hacer el milagro de crearlo, y su ministro de Exteriores inventa embustes sobre las pensiones y los subsidios de paro, gana adeptos por días la nueva formación conservadora Ciudadanos. Un partido político con apariencia algo más educada en sus formas y con formación académica convencional, que acaba de esbozar las primeras líneas de su programa económico. De inspiración derechista, por supuesto.
Ciudadanos propone la puesta en marcha de lo que denomina Complemento Salarial Anual Garantizado, que beneficiaría a las rentas más bajas —alrededor de cinco millones de hogares— y que sería financiado a través de créditos fiscales que se descontarían del IRPF.
Según Luis Garicano, uno de los economistas responsables del programa de Ciudadanos, millones de españoles tienen ahora niveles de ingresos que ni siquiera llegan al nivel del Salario Mínimo Interprofesional, y eso es un lastre para toda la sociedad. De algún modo, esto viene a corregir la doctrina de la austeridad con un tinte keynesiano: si no hay dinero en manos de la gente, no hay consumo.
Lo que Ciudadanos propone es incentivar el trabajo a través de una ayuda estatal que complemente los ingresos laborales de los hogares de aquellos trabajadores con salarios más bajos y empleos más precarios. Este complemento tendrá diferentes tramos según los niveles de renta y la situación familiar de las personas (soltero, pareja y, sobre todo, número de hijos). Cabe resaltar que uno de los elementos claves de este programa será evitar que se creen desincentivos al trabajo, ya que sólo cobrarían ese complemento quienes tuvieran un empleo. Con esa restricción pretenden que el Complemento sea más atractivo que cobrar el paro.
Al atento observador de la cruda realidad celtíbera se le ocurren, prima facie, las siguientes cuestiones:
1) Al invocar el manido tópico de la presunta holgazanería del parado (prefieren cobrar el subsidio a trabajar), la propuesta de Ciudadanos (que no ciudadana) incurre en una absoluta falta de realismo: en efecto, gracias a las políticas socialmente represivas llevadas a cabo por el Partido Popular, la mitad de los desempleados no perciben ningún tipo de prestación. La tasa de cobertura (el número de parados que tiene acceso a algún tipo de beneficio) se situó en el 57,6% a finales de 2014. Al día de hoy, hablar de falta de incentivo para el trabajo es un prejuicio viejuno.
¿Cómo pretende la formación Ciudadanos ayudar a esos ciudadanos de carne y hueso en situación de total desamparo?
2) Otro aspecto perverso de este Complemento Salarial es que, puesto que sólo se facilitaría a quienes tuvieran un trabajo, acepta la existencia de empleos remunerados con salarios tan precarios que no alcanzan para vivir con un mínimo de decencia.
¿No sería mejor, en ese caso, apoyar un Salario Mínimo Interprofesional de cuantía suficiente para que el hecho de trabajar no lleve consigo el estigma de la pobreza?
Y, en todo caso, puesto que ese Complemento Salarial sería pagado con dinero del Estado, ¿qué razón hay para no entregalo directamente a la persona como derecho de ciudadanía —que es una condición universal de todo miembro pleno de la sociedad inserta en ese Estado—, en lugar de hacerlo de forma discriminatoria sólo a la persona que tiene un trabajo precario —lo que constituye una situación de desigualdad en la que existe un grado de dominación por parte del empleador—.
3) ¿Tiene Ciudadanos una visión liberal, en el mejor sentido de la palabra, de la dignidad de la persona? Porque resulta poco liberador ese intervencionismo sobre la situación familiar de las personas (soltero, pareja, número de hijos...) a la hora de aplicar el Complemento.
¿Acaso se pretende coartar la libertad personal a la hora de de elegir su opción de vida por parte del trabajador precario? ¿Además de pobre ha de someter su vida al escrutinio del inspector del sistema asistencial?
Atención: work in progress: se ruega no lo copien y reboten todavía: Fiel a mi lema de no trabajar en demasía, acabo por esta noche la redacción de este artículo incompleto, Al fin y al cabo, no recibo remuneración por el blog y no quisiera caer en la categoría del woorking poor que, por las trazas, parece defender Ciudadanos. Uno es un ciudadano pobre pero honrao que tiene a gala trabajar sin permiso de otro.
O sea, continuará