Por José Alejandro Tropea
A lo largo de la azarosa historia de la ciencia hubo hombres con ideas, teorías y/o especulaciones que por adelantarse a su tiempo no fueron comprendidas y se enfrentaron a todo tipo de obstáculos, se las ignoraba o se las tenía por absurdas y eran objeto de burla, y si además afectaban determinados intereses o se enfrentaban a determinadas creencias sus autores eran perseguidos, censurados o asesinados. Estos son algunos de los tantos ejemplos que se pueden citar sobre la anticipación en la ciencia.
EN EL PRINCIPIO FUE LA EVOLUCIÓN
Antes de hablar de lo que Anaximandro (aprox. 611 a.c. - 547 a.c.) pensaba ubiquémoslo en el contexto de su época. La ciencia griega, entonces llamada filosofía natural, tenía dos corrientes, una más abstracta y matemática (los pitagóricos y Platón) y otra más física y empírica (Tales, Anaximandro, Anaxímenes,, Aristóteles y los atomistas como Demócrito, Empédocles y Leucipo). No debiera asombrar entonces que introdujera la idea de la evolución en la ciencia, Anaximandro (de paso digamos que fue amigo de Tales) decía que los seres vivos surgieron del légamo que fue evaporado por el Sol. Esos seres en principio tenían caparazones espinosos. Con respecto al hombre consideraba que nació de un pez y al principio era un pez. Estas y otras ideas las publicó en "Sobre la Naturaleza", su único libro. Que hiciera una interpretación evolucionista en el terreno de la biología, además de otras ideas en otros temas, ha hecho que se lo considerara más que ningún otro de su tiempo el que más se acercó al punto de vista actual de la ciencia.
EXOPLANETAS Y ESPECULACIONES SOBRE EVENTUAL VIDA EN EL UNIVERSO
Todavía no había nacido el astrónomo que le daría su nombre a la sonda Kepler de búsqueda de exoplanetas cuando ya Anaxágoras de Clazomene (488 a.c. - 428 a.c.) pensaba que además de la Tierra se habían originado otros mundos, que estaban habitados por hombres como nosotros, que tenían ciudades y campos cultivados como los nuestros, además de sus soles y lunas. Cuando expuso en Atenas estas y otras ideas sobre los planetas y el Sol, no fueron bien recibidas. Plutarco cuenta que el libro de Anaxágoras fue poco reconocido; "circulaba en secreto, lo leían muy pocos y fue recibido con cautela". Y según algunas versiones Pericles intervino para salvar su vida ayudándolo a abandonar vivito y coleando la ciudad.
HELIOCÉNTRISMO SACRÍLEGO
Aristarco de Samos (310 a.c. - 230 a.c.), que vivió en los primeros tiempos de la Biblioteca de Alejandría propuso el sistema heliocéntrico. Pero la idea de colocar al Sol en el centro de los movimientos planetarios, con la Tierra como un planeta más girando a su alrededor era demasiado radical para la época. No tuvo ninguna o casi ninguna aceptación. De hecho, por divulgar esta teoría Cleantes propuso que se lo acusara de impiedad, algo similar a lo que le pasó a Anaxágoras.
CALCULAR EL TAMAÑO DE LA TIERRA SÍ IMPORTA
Eratóstenes de Cirene (276 a.c. - 195 a.c.), que además de dedicarse a la astronomía y la matemática, fue conservador de la Biblioteca de Alejandría, se hizo célebre por ser el primero en medir el diámetro de la Tierra usando apenas algunos datos geográficos de latitud y longitud y cálculos trigonométrico básicos. El error en el resultado fue asombrosamente pequeño. Y lo mejor de todo es que no fue perseguido acusado de hacer cálculos heréticos.
ÓRBITAS ELÍPTICAS PARA TODOS
Arzaquel fue un importante astrónomo cordobés que vivió en Toledo. Hacia el año 1080, anticipándose casi 600 años a Kepler sugirió que los planetas se movían alrededor del Sol en elipses. Pero nadie aceptó esta idea que se oponía totalmente a las doctrinas imperantes basadas en el "Almagesto". Acá es necesario hacer una aclaración importante respecto a la teoría de Arzaquel, para que no se piense que lo que propuso era exactamente lo que después expondría Kepler. En realidad, de lo que Arzaquel hablaba era de reemplazar los círculos de las deferentes por elipses dentro del esquema geocéntrico de deferentes y epiciclos de Tolomeo, justamente el sistema expuesto en el Almagesto.
ECUANTES, EXCÉNTRICAS, DEFERENTES Y EPICICLOS AL TACHO
al-Bitrugi (Alpetragius en latín) hacia el año 1170 propuso reemplazar el sistema de Tolomeo de ciclos y epiciclos por un sistema mucho más simple de círculos concéntricos. Si bien sus ideas no prosperaron ell libro donde exponía estas ideas fue traducido al latín por Michael el escocés (hacia 1175 - 1235) y se convirtió en el primer desafío a la astronomía tolemaica en Europa occiddental.
"EPPUR SI MUOVE" 1
Oresme, obispo de Lisieux (1332 - 1382), que fue consejero confidencial de Carlos V de Francia y después de Carlos VI, no solo era un importante eclesiástico y teólogo, sino que también se destacó en matemática y economía. En astronomía combatió la doctrina de la inmovilidad de la Tierra.
"EPPUR SI MUOVE" 2
Nicolás de Cusa, hijo de un pescador que llegó a Cardenal de la Iglesia, hacia 1430 también rechazó totalmente la astronomía clásica y expuso su opinión de que la Tierra "se mueve como las tras estrellas".
OTROS SOLES, OTROS MUNDOS
Giordano Bruno (1547 - 1600) estando en Londres en 1583 publicó tres pequeños libros, en uno de ellos, Dell¨ infinito Universo e Mondi ("Sobre el Universo infinito y sus mundos") escribió: "Me ha parecido indigno de la bondad y poder divinos la creación de un mundo finito, capaz como era de producir además otro y otros sinfín, de suerte que he declarado que hay sinfín de mundos particulares semejantes a nuestra Tierra; con los pitagóricos tengo a ésta como uan estrella, y parecidos a ella son la Luna, los plantetas y otras estrellas, las cuales son infinitas en número, y todos estos cuerpos celestes son mundos." En otro pasaje de ese libro explica que cada mundo gira alrededor de su Sol. Todo esto era teórico, especulativo, pero de hecho revolucionario, por eso Bruno fue más lejos que Aristarco y Copérnico. Sacó del centro del Universo no sólo a la Tierra sino también al Sol. De hecho rechazó considerar a cualquier lugar del Universo como el centro del mismo, argumentando que "como el universo es infinito, no puede decirse con propiedad que haya ningún cuerpo que esté en el centro del Universo, ni tampoco en sus fronteras". En el mismo año de su muerte William Gilbert, el médico personal de la reina Isabel de Inglaterra, publicaba su libro "De Magnete"; en este, si bien era básicamente de física, en el último capítulo expone una teoría del Universo que es el esquema de Bruno. Aunque su nombre no se cita en todo el libro, en 1651, en un libro póstumo de Gilbert, On our sublunary World, a New Philosophy ("Sobre nuestro mundo sublunar, una Nueva Filosofía") expuso nuevamente las mismas ideas y esta vez las atribuyó a Bruno.
UNA NOTORIA BINARIA ECLIPSANTE
En 1782 el astrónomo inglés John Goodricke (1764 - 1786) estudiando en detalle la estrella Beta Persei, o Algol en árabe ("el vampiro"), llegó a la conclusión de que alrededor de ella giraba otra muy tenue (más adelante se descubriría que en el sistema existe una tercera "en danza"), moviéndose en una órbita cuyo plano estaba casi de canto visto desde la Tierra. Esto hacía que cada vez que se interponía entre Algol y la Tierra, variaba el brillo de aquélla. Pero esta explicación no fue tomada por seria en su tiempo.
LA INVEROSÍMIL EDAD DE LA TIERRA
En 1785 , el geólogo escocés James Hutton (1726 - 1797) publicó un libro titulado Theory of the Earth ("Teoría de la Tierra") en el cual describía los lentos cambios que experimentaba la superficie terrestre. Allí sugirió el "principio de uniformidad", según el cual los cambios que se producían actualmente se venían produciendo también en el pasado con el mismo ritmo.. Este principio hacía necesario considerar enormes lapsos de tiempo (cientos y cientos de millones de años) para explicar los espesores de los sedimentos, la erosión obervada en el planeta y los plegamientos y otros cambios violentos. Pero Hutton no pudo convencer de esto a sus contemporáneos.
UNA HIPÓTESIS EN LA NEBULOSA
En 1845 el astrónomo William Parsons propuso una hipótesis "temeraria", al sugerir que las nebulosas no eran nubes de gas pertenecientes a nuestra galaxia sino que estaban fuera de ella a grandes distancias y que además eran otras galaxias similares a la nuestra, otros "universos-islas". Pero su propuesta tuvo pocos seguidores, incluso hasta comienzos del siglo veinte se discutía la ubicación de las nebulosas y su naturaleza.
TODOS LOS INFINITOS SON IGUALES... PERO ALGUNOS SON MÁS IGUALES QUE OTROS
El estudio de los conjuntos infinitos que hizo el matemático Georg Cantor (1845 - 1918), fue considerado por su maestro Kronecker como una locura matemática, Cantor descubrió que los infinitosno tienen todos el mismo tamaño, el mismo cardinal: por ejemplo, el conjunto de los racionales es enumerable, y por eso del mismo tamaño que el conjunto de los naturales, pero el conjunto de los números realeses más grande. Por su dedicación a ese tema algunos colegas, qu eno podían entender sus descubrimientos lo acusaron de blasfemia.
ABSURDOS COHETES IMPULSADOS POR COMBUSTIBLE LÍQUIDO
Robert Hutchins Goddard (1882-1945) junto a Konstantin Tsiolkowski (1857-1935) y Hermann Oberth (1894- 1989) es considerado uno de los tres padres de la astronáutica. En 1914 se le concedieron dos patentes bajo el título "Aparatos de cohetería", por un cohete de combustible sólido y por otro de combustible líquido (y con etapas múltiples). En 1919 el Instituto Smithsoniano publica su "Método para alcanzar altitudes extremas", entonces escritores, científicos y editores satirizaron esta y otras declaraciones de aquella obra, que se convertiría en un clásico. En enero de 1920, en sus columnas, el New York Times se burlaba de las matemáticas de Goddard, llegando a afirmar que carecía del conocimiento básico de la escuela secundaria. En un pasaje se lee: "no conoce la relación de acción y reacción, y la necesidad de tener algo mejor que un vacío contra el que reaccionar". Lo llamaban "cazador de titulares" y se burlaban de el como "el hombre de la Luna".
En 1926 lanza su primer motor cohete de combustible líquido. En 1929 lanza su cuarto cohete de combustible líquido (provisto en la proa de barómetro, termómetro y cámara fotográfica). Este se eleva dieciocho metros, para después caer a tierra. Sobre esto un diario tituló irónicamente "el cohete a la Luna falla por 382.079.2 kilómetros". Aunque llegó a atraer la atención del Ejército de los Estados Unidos por su trabajo sobre cohetes, lo rechazaron al no poder entender las aplicaciones militares de los mismos. Wernher Von Braun, que estaba siempre al tanto de los trabajos y experimentos de Goddard llegó a decir de sus patentes: "este hombre lo tenía todo".
MATERIA OSCURA COMO POCAS
Hacia 1930 el astrónomo Fred Zwicky calculó la masa total del cúmulo galáctico Coma y comprobó que la fuerza gravitatoria que producía no era suficiente para mantener las galaxias agrupadas como estaban. Esto lo llevó a postular la existencia de materia adicional que no era visible o detectable como la que conocemos. Pero su teoría fue rechazada por varias décadas hasta que se aceptó su existencia, es la hoy llamada "materia oscura".