Hacia 1877 la llegada de los trabajadores a las explotaciones mineras de los montes de Triano empezó a ser tan masiva que los propios mineros comenzaron a construir, entorno a las minas, chabolas para alojarse.
Algunas se levantaron junto a la única arboleda que aún quedaba y ésta dio nombre al que fue el poblado minero más importante y espectacular de Bizkaia: La Arboleda.
Un lugar lleno de historia y declarado Conjunto Monumental por ser la única barriada del País Vasco que conserva la trama urbana y arquitectura característica de las casas y otros edificios construidos por las compañías mineras.
La referencia de entrada, puede verse en un panel en las inmediaciones, y resume perfectamente la singular historia de este pulmón vizcaino.