Revista Economía

La Argentina entra en recesión con elevada inflación

Publicado el 08 julio 2014 por Huella Económica @Huellaeconomica

Por Diego Acevedo para Huella Económica (Especial desde Argentina)

Los cambios económicos luego de la derrota electoral del pasado año en Argentina se hicieron muy evidentes en el gobierno de la Doctora Cristina Fernández de Kirchner: devaluación de la moneda, suba de las tasas de interés, incremento en las tarifas de transporte y servicios públicos, aumentos en los precios de los combustibles y el fin de la política de desendeudamiento. Giro ortodoxo de un modelo que se agotó.

ministerio economia argentina

Cae la industria y la economía entra en recesión

La economía argentina ingresa en recesión con una inflación que se ha disparado luego de la última devaluación ocurrida en enero.

Los últimos datos oficiales de mayo revelan que la industria tuvo una caída interanual del 5% arrastrada por el derrumbe del sector automotriz que acumula una baja de 35,3% en la producción y 40% en las ventas (contra Junio de 2013) según la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa). Otros sectores que cayeron fueron la construcción (4,4%), metalmecánica (9,1%), fabricación de caucho y plástico (2,9%), tabaco (4,2%), papel y cartón (2,7%) textil (2,5%), comparado con igual mes del 2013. El último dato de junio es una caída de las ventas minoritas (8.8%) según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa. En cambio, los sectores que escaparon de la racha negativa fueron entre otras la refinación de petróleo (14,6%), productos químicos (9,7%), industrias metálicas (5,2%), edición alimenticia (2,8%) e insumos para la construcción (0,6%).

Formalmente se define recesión cuando la economía de un país registra dos o más trimestres consecutivos de caída en la actividad económica. La economía ya registra dos trimestres con contracciones, el trimestre del año pasado con -0.5% y el primer trimestre de este año cerró con -0.8%. El PBI también mostró en el primer trimestre una caída interanual de 0,2%. Oficialmente la Argentina entró en recesión. La devaluación del peso argentino fue récord luego del revés en las urnas que tuvo el oficialismo -acumulando un 38 por ciento- y tuvo su pico máximo en el mes de enero. Así el dólar oficial pasó en pocos meses de $ 5,89 a 8,15. El dólar en el mercado negro está en los 12 pesos, un precio que tiende a deslizarse para arriba en el tiempo. La inflación se mantiene elevada pese a los acuerdos de precios que oficialmente promociona el Gobierno. Según los últimos datos, en 2013 la “Inflación Congreso” que es un promedio de varias consultoras, marcó un 28,3% mientras que el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) arrojó sólo 10,90%. Un tercio de lo que marcan las consultoras privadas.

Con el nuevo índice de precios –fue una de las exigencias del Fondo Monetario Internacional- presentado en 2014, el Gobierno busca recuperar algo de credibilidad en las cuestionadas estadísticas oficiales, producto de una intervención que lleva ya siete años. Estudios privados estiman que la inflación de 2014 cerrará cercana al 40%. Mientras que el nuevo IPC oficial registra un acumulado 13,5% en el año y 21.3% en la comparación interanual. Estiman que junio cerrará en torno al 2%. Pese al marco recesivo de la economía los precios siguen para arriba.

Un país sin datos oficiales de pobreza. Otra polémica que se desprende del Indec es la falta de cifras oficiales de pobreza e indigencia. La suspensión de la difusión de cifras oficiales por parte del Gobierno desnudó otras de las contradicciones de una administración que dice estar supuestamente preocupada por los pobres pero que en realidad no sabe cuánto es el porcentaje de personas bajo la línea de pobreza e indigencia. Debido a las manipulaciones y ocultamiento de datos oficiales, se hacen mediciones alternativas en Argentina para estimar la pobreza y éstas están muy lejos de la oficial:

Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas (IPyPP): 36,5%

Universidad Católica Argentina (UCA): 27,5%,

Central de Trabajadores Argentinos (CTA): 17,8%

CGT Opositora: 30,9%

Centro de Estudios Económicos y Sociales (CESO): 13,2%

INDEC: 4.7%

Año 2013

 

Devaluación y caída del salario real

La devaluación de la moneda terminó de empujar los precios para arriba y pese que desde el Gobierno negaron cualquier tipo aumento, lo cierto es que se autorizaron subas en el boleto del transporte público que llegaron al 100% en menos de un año, las tarifas de gas y agua también acompañaran las subas junto con los combustibles de la re estatizada YPF que llegó al 40%. La Asignación Universal por Hijo -es una ayuda social a las personas de menores recursos- tuvo un aumento del 40%. Aumentos que están sujetos a la discrecionalidad del Ejecutivo. La devaluación fue también unas de las herramientas usadas junto con el sacudón de las tasas de interés para frenar la alarmante caída de las reservas internacionales del Banco Central. Eso sí, la actividad económica cayó y se abrieron las puertas de la tan temida recesión. Gran parte de los aumentos salariales cerraron por debajo del 30%, muy lejos de la inflación proyectada para fin de año. Los datos alternativos publicados por las consultoras privadas evidencian una caída del poder adquisitivo del 5% en contraposición del Indec que habla de un “empate” entre las los aumentos salariales y la inflación. Según informe del Banco de Ciudad el salario real cayó 14,2% en un año (medido contra mayo 2013).

El salario mínimo medido en dólares cayó fuerte luego de la devaluación, pasó de USD 589 a 441,71 (Agosto 2013 contra Julio 2014). El 50% de los trabajadores ocupados gana menos de $ 4.500 (USD 552,14) según publicó el INDEC. Para igualar el poder adquisitivo medido en dólares, el salario mínimo debería ser de $ 4.800,35; o sea USD 589. Representa un aumento del 33,34%. El ajuste se manifiesta en suspensiones, despidos, tomas de fábricas y conflictividad social que va en ascenso. Los cortes de vías públicas en el año 2014 fueron de 3.499 contra 2.605 del 2013, según Diagnóstico Político.

 

Escándalos de corrupción y buitres que sobrevuelan el país

El procesamiento del vicepresidente de la República Argentina colocó por primera vez en la historia a un vicepresidente procesado por un hecho de corrupción. Amado Boudou está acusado de cohecho y de negociaciones incompatibles con la función pública al usar su influencia en el salvataje financiero de una empresa relacionada con la impresión de billetes. También está siendo investigado por la Justicia argentina por enriquecimiento ilícito, entre otras de las tantas causas que acosan al número dos de la Argentina. Otros funcionarios K están en la mira de la Justicia.

La sentencia del Juez Thomas Griesa que obliga a pagarle a los fondos buitre el 100% puso en aprietos a la Argentina y el fallo amenaza con llevar al país al default como en la crisis del 2001, con todas las consecuencias negativas que ello implica. Pese a la retórica oficial de “Patria o Buitres”, el oficialismo cambió su discurso radicalmente y optó en buscar un arreglo rapidamente con los denominados buitres. “Estamos dispuestos a negociar para pagar al 100% de los bonistas en condiciones legales, justas y equitativas, pero no aceptamos extorsiones”, fueron las palabras de Cristina Fernández de Kirchner

Los capítulos protagonizados con Chevron, Fondo Monetario Internacional, Repsol y el Club de París revelaron la necesidad de financiamiento externo que tiene el kirchnerismo para sostener un modelo que de por sí está agotado, esto fue abortado momentáneamente por la irrupción de los buitres en la escena internacional. “La vuelta al endeudamiento externo o la devaluación con ajuste fiscal y salarial constituyen falsas salidas para la encrucijada actual, que lejos de permitir un avance no harían más que cargar sobre las espaldas de los trabajadores el peso del retroceso de la economía, como tantas veces ha ocurrido en las últimas décadas”, había publicado el centro de estudios creado por Axel Kicillof (CENDA) en el diario Página/12, ahora ministro Economía. Un default puede empujar de nuevo una crisis económica y financiera, como ocurrió en el final de la convertibilidad.

Maxidevaluación de la moneda, pesificación asimétrica y default fueron algunas de las bases del nuevo modelo que se configuró en la Argentina del 2002, ahora llamado “modelo de matriz diversificada con inclusión social”.

[email protected]   08/07/14


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas