Revista Religión
“Ve a la hormiga, oh perezoso (…), y sé sabio; la cual no teniendo capitán, ni gobernador, ni señor, prepara en el verano su comida, y recoge en el tiempo de la siega su mantenimiento” (Proverbios 6.6-8).
La hormiga es sabia por guardar en el verano para el invierno, pero su verdadera fortaleza radica en su autodisciplina, porque lo hace de motu proprio, sin que nadie tenga que obligarla. La mayoría de las personas necesita tener en su vida capitanes, gobernadores o señores para poder realizar las cosas.
Capitán: Muchos necesitan esto en su trabajo, no tienen la capacidad de funcionar por sí mismos y entonces viven recibiendo órdenes.
Gobernador: A otros los gobierna la urgencia, siempre esperan a último momento para todo, se creen libres pero viven bajo el yugo de la esclavitud de estar siempre atrasados y corriendo.
Señor: Hay quienes necesitan depender de señores para su economía. Como no saben ahorrar viven pagando intereses y enriqueciendo a otros con su trabajo y esfuerzo.
Es bueno perseguir objetivos en la vida, pero el disciplinarte para alcanzarlos hace que seas más inteligente en esa tarea.
Simplificate la vida disciplinándote y estarás preparado para alcanzar todo tipo de logro, recordá que el que carece de disciplina carece de todo.
Muchas personas se conforman con menos de lo que podrían ser o tener por no pagar el precio de autodisciplinarse. Sé sabio y disciplinate en todas las áreas de tu vida.
Yo bendigo tu vida para que puedas desarrollar autodisciplina y vivas en libertad alcanzando todo lo que desees y siendo de ejemplo a los demás.
(Devocional Diario)