Menudo regalo navideño fue la intervención del BCE del día 21, por medio billón de euros, inyectando liquidez a la banca va en la misma dirección de señalarla como un eslabón débil de la cadena. O fuerte, porque nuevamente toneladas de dinero que pagaremos todos van a salvarlos y mucho se quedará entre sus bonus.
La noticia la celebraba el siempre ponderado Juan Ignacio Crespo ‘El euro salvado por el BCE’…'el BCE ha salvado al euro y la eurozona…lo único que ha quedado descartado es la catástrofe. Lo que no es poco…'
La Cumbre europea del 8 y 9 de diciembre terminó con resultados contradictorios, por un lado evitó con sus acuerdos (el vaso medio lleno) en ese momento que los mercados tumbaran el euro, de hecho en los días siguientes las tensiones se relajaron, lo cual ya era un síntoma de que no existía un total rechazo, se había evitado el desastre.
Por otro lado (con el vaso medio vacío) aquello era insuficiente para dar la necesaria estabilidad, se abrían nuevos frentes de organización, política, económica, jurídica, a concretar rápidamente (existe un borrador del nuevo tratado para los 17 de la eurozona + 9 de la UE; con 14 artículos que marcarán nuestras vidas y del que muy poco sabemos los españoles por los viejos y nuevos partidos. Dicho tratado entraría en vigor con aprobación mayoritaria de 9). Y además seguían latentes los viejos problemas, principalmente el vinculado a la deuda y la banca, donde la situación ya era dramática.
El F.M.I. declaraba en septiembre que ‘la banca europea está abocada al colapso financiero’. La intervención conjunta de los bancos centrales de EEUU, Reino Unido, Japón, Suiza, Canada a finales de noviembre (efectuaron otra intervención masiva a mediados de septiembre) y la visita días antes de la cumbre del representante del Gobierno de Obama, indicaba a las claras que aquello era una emergencia global.
Se conceden préstamos de 500.000.000.000 euros, a 3 años, por fin mas largo plazo que un año, a 523 bancos que son la mitad del sistema europeo, al 1%, con deuda pública de algunos países al 4% o 6% hace pensar que parte se destinará a aumentar beneficios por esta vía, uno se pregunta ¿por qué no la compra directamente el BCE? Y recuerda que el plazo medio de colocación de deuda española está por encima de 6 años el doble de tiempo, qué pasará?. Al margen de que otra parte del dinero permita apuntalar balances, arreglar la solvencia, otra cubrir vencimientos inminentes de unos 140.000 millones, existe amplia desconfianza en que el dinero pueda llegar al crédito de pymes.
PD. Los problemas continúan, la catástrofe se evitó, o aplazó. Nuestros políticos nuevos y viejos, los grandes y pequeños, siguen sin hablarnos de estos nuestros problemas que condicionan todos los demás.