En la noche del 24 al 25 de Febrero de 1942, tuvo lugar uno de los hechos más bochornosos protagonizados por la defensa nacional de los Estados Unidos, la Batalla de los Ángeles. El control aéreo de la costa de Los Ángeles creyó detectar un avión de reconocimiento que precedería a un ataque japonés, provocado la psicosis general.
Ya el día anterior Inteligencia Naval informó de la posibilidad de un ataque japonés en las próximas diez horas. La misma tarde del 24 se detectaros unas luces sospechosas en la costa, aunque desaparecieron poco después. Pasadas las diez y veinte de la noche se desactivó la alerta y todo volvió a la calma. Aunque duraría poco.
A las 2:25 horas, los radares detectaron un objeto, que creían un avión enemigo. Aunque no volvió a aparecer, observadores en tierra afirmaron haber visto aparatos sobrevolando la costa por lo que saltaron las alarmas y se cortó el fluido eléctrico de la ciudad. La población, aterrorizada por las sirenas, se precipitó a esconderse en cualquier lugar que pudiera ser un refugio. Solo los gigantescos focos antiaéreos iluminaban los cielos en busca de bombarderos.
Mientras la Guardia Nacional toma posiciones de defensa y la Fuerza Aérea se prepara para interceptar a los aviones enemigos, aparecían constantes informaciones confusas, como que se vio como desde la costa se hacían señales luminosas a un submarino japonés, que había aviones enemigos sobre Long Beach, o que había unos 25 aviones en la vertical de Los Ángeles.
En medio de la confusión y el estrés el cielo se llena de espesas nubes que impiden la visibilidad, por este hecho, hacia las tres de la madrugada el alto mando de la defensa ordena que la 37ª brigada de artillería costera que abra fuego. Como el enemigo no es visible realizan bombardeos de barrido para intentar cubrir todo el espacio aéreo posible durante casi una hora, sin alcanzar a ningún aparato enemigo, aunque algunos artilleros afirmaron que había objetos de diferentes tamaños y a diferentes altitudes, posiblemente confundidos por las explosiones. Durante la infructuosa defensa se dispararon mas de 1400 proyectiles de artillería de más de 8,5 kilogramos que al caer sobre la ciudad provocaron destrozos de diversa consideración sobre los edificios, incendios y la muerte de varios ciudadanos inocentes. Un informe inicial decía que se habían estrellado hasta cuatro aparatos y hasta uno que intentó aterrizar en Hollywood.
Tras el incidente, al día siguiente, Frank Knox, el secretario de la marina, ofreció una rueda de prensa en la que en lugar de reconocer que todo se trató de un tremendo error eludió dar respuestas claras, lo que generó aun más confusión entre la población. Tambien el Congreso creó una comisión de investigación que finalmente determino que todo fue debido a nervios de guerra y que todos los informes de avistamientos fueron erróneos.
El caso se volvió a reabrir en la década de los ochenta y concluyó que los acontecimientos se iniciaron al confundir un globo meteorológico con un avión enemigo y se precipitaron por el miedo a un nuevo ataque japonés como el ocurrido en Pearl Harbor.
Aún sigue habiendo gente que cree que en realidad todo fue provocado por la visita de extraterrestres y se oculta la verdad.
Para saber más:
Nonsei SGM
La Matriz Secreta
Marcianitos Verdes
Anfix