Foto: PSOE
ESTO SE ANIMA. La propuesta, ‘a la desesperada’, del líder de los socialistas madrileños en Madrid, José Manuel Franco Pardo, ha sacudido el escenario político antes de lo previsto. Según explica en El País, su idea es que todos los sectores de la izquierda (PSOE-M, Podemos, Izquierda Unida, movimientos sociales y sindicales y otros colectivos que compartan el mismo proyecto) vayan en una misma candidatura para evitar que la alcaldía de Madrid vuelva a manos de la derecha.El planteamiento suena bien desde el punto de vista conceptual y teórico, pero parece inviable dadas las relaciones de indisimulada y creciente tensión, cuando no enfrentamiento abierto, que han manteniendo los socialistas con Ahora Madrid a medida que ha ido avanzando el mandato municipal. Ese matrimonio de conveniencia —como el de Cifuentes y Aguado en la Comunidad, salvando todas las distancias—, deja tantas disconformidades y agravios que el acuerdo parece improbable.Y lo es, porque más allá de los indudables efectos electorales que pudiera tener, suena a que el más débil políticamente en este asunto, el PSOE-M, necesita subirse a un tren con una locomotora más potente, la de Carmena, para no quedarse fuera de juego. Y, suena, sobre todo, a que si los socialistas hubieran encontrado un candidato potente no necesitarían plantear esta plataforma de izquierdas, candidatura amplia que es lo más parecido a una tabla de salvación.A todo esto, Manuela Carmena, de cuya fortaleza como candidata para 2019 nadie duda, pese al lógico desgaste de gobernar en minoría con el apoyo puntual de los socialistas, se resiste a desvelar si se encuentra con ganas y fuerzas para repetir. Su decisión, que yadebe tener tomada, arrojará un poco más de luz en este inquieto y agitadoescenario madrileño que, como siempre, es la antesala de lo que vaya a ocurrir en las generales de 2020.