Fecha: 4, 5, 6, 11 y 14 de Junio de 2010
Lugar: Arganda del Rey (Madrid)
“I wanna take you away
Let’s escape into the music, DJ let it play
I just can’t refuse it
Like the way you do this
Keep on rockin’ to it
Please don’t stop the, please don’t stop the music “
En esta segunda entrega de la becaria en Rock in Río, hablaré de lo cerca que estuve de llegar a la fama…la toque con los dedos…
Para resumir un poco el cartel, y así poder situarnos todos (nosotros, los tres que leemos esto), más o menos era así: Viernes 4: Bon Jovi y Pereza; Sábado 5: Rihanna , Shakira y David Guetta; Domingo 6: Miley Cyrus; Viernes 11: Rage Against The Machine y Lunes 14: Metallica.
Como ya os dije, teníamos que estar un par de horas antes de la apertura en el recinto. El segundo día era el que más me gustaba, así que me dirigía yo tan contenta pensando que íbamos a poder ver a Macaco ensayando…que me da bastante igual, dicho sea de paso, porque claro, Rihanna, Shakira y David Guetta estarían en sus respectivos hoteles descansando para la noche. Cual fue mi sorpresa, cuando nos bajamos del autobús de voluntarios allí en mitad del desierto, atravesamos la puerta con nuestras acreditaciones, y comienzo a escuchar los primeros acordes de “Gitana” de Shakira, en ese preciso instante, no sé qué se adueñó de mí y empecé a correr como alma que lleva el diablo el kilómetro que nos separaba del escenario Mundo, y sí, a lo lejos veía pequeñita a Shakira. Hubo un momento que pude verme a mí misma corriendo hacia el escenario en el interior del recinto donde sólo había gente trabajando y me di bastante verguenza, luego me quejo de los fanáticos de las puertas). El caso, que de pronto, noto una presencia tras de mí a partir de los últimos 500 metros que me separaban del escenario. Eran dos de seguridad, barriletes y super lentos, corriendo tras de mí, y, me pareció tan ridículo que me paré y les dije: “peeeerooooo…¿Qué es lo que está pasando aquí?“, y me dicen que desde producción de Shakira han exigido un perímetro de seguridad en el ensayo de 500 metros, que no quiere que nadie le moleste.‘¿¿Qué??’ ‘¿¿Cómo??‘ tengo a mi admirada Shakira ahí al lado, puedo gritarle agusto pero, no me escuchará. El caso, que obedecí a los dos chavales que guardaban el perímetro, no porque no pudiera irme de ellos, sino porque veía ridículo que me tuvieran que acabar sacando de la primera fila. Y nos pusimos allí donde nos dejaron. Yo había soñado con que ese sería mi salto a la fama y un dichoso perímetro de seguridad no me lo impediría. Empecé por gritar cada vez que apagaban la música frases como: “Shakira, Yo soy tu gitana, súbeme ahí que bailo” (todo esto con mi melena al viento y una rebeca sobrevolando el cielo todo lo alto que mis brazos alcanzaban), “Shakira, pa’ gitana yo”, etc. etc. Intenté varias veces razonar lo del perímetro, hasta que vino el jefe de seguridad a decirme que no dudaba de mis dotes artísticas, y que él personalmente me subiría al show con las bailarinas profesionales, pero que se lo habían pedido desde backstage, y a menos que tuviéramos una acreditación de esa zona, no pasaba nadie. Seguí un rato más dando la paliza, gente de por allí pedía que me dejaran entrar para que me callase, y, de repente, veo anonadada como Martina Klein, que por lo visto ese día desfilaba con Jon Kortajarena alias “el enano guapo” en el espacio de Moda de El Corte Inglés (perdonad estos instantes publicitarios), atraviesa EL PERÍMETRO de seguridad de Shakira, sin acreditación de backstage ni nada. Ahí sí que me enfadé, y empecé a gritar en alto, para que Martina me oyera: “¿Qué? que porque es Martina Klein pasa y nosotros no. ¿Como es modelo ella no molesta en el ensayo?“, y bueno, otra serie de improperios que no vienen al caso. Ni que decir tiene que, lamentablemente, no nos dejaron acercarnos al escenario hasta que Shakira terminó, y desapareció… Había perdido mi primera oportunidad de ser famosa.
Después de todo esto, acudimos a nuestros puestos, la verdad que era un día muy entretenido, porque los fans de hoy era fans de verdad, de los de toda la vida, de los que llegan gritando, cantando a las cámaras de televisión canciones en un inglés totalmente ficticio, se pegan y empujan por conseguir sitio en la valla de entrada, etc. La chica que me tocó en mi fila como primera es de esa gente a la que no le han dado una torta en casa a tiempo (que conste que no apruebo la violencia…me refiero más bien a algo simbólico), metiéndonos presión a mi compañero y a mí para que le validásemos y nos quitáramos de en medio y se auto-cortó su entrada…y todo de muy malas maneras. Lo gracioso fue que cuando mi compi le validó la entrada se atascó la máquina y no funcionaba, para cuando salió al escenario le habían adelantado como 40 personas, entre ellas, la doble colombiana oficial de Shakira, que estaba por allí.
Cuando acabamos el turno, y nos tomamos nuestras hamburguesas del Burger King (instantes publicitarios), fuimos a coger sitio para Rihanna…mientras tanto se comenta que tocaba Macaco… Y salió Rihanna, y salió como un adefesio, y comprobamos lo duro que es ser estrella del pop, que por muy guapas que sean hay un acuerdo tácito por el que deben “desfigurarse”.
Por fin salió Shakira, para entonces había ido adelantando puestos hasta una honrrosa octava fila más o menos. El agobio era tremendo, pero merecía la pena. Casi no se oía a Shakira, estábamos todos cantando y bailando como si nos conociéramos de siempre. Por cierto, muerte a los que fuman en las primeras filas de los conciertos, que no controlan. Cuando acabó Shakira, se comenta que tenía una fiesta en la carpa que había traído hasta allí con todos los famosetes de la zona vip (Miguel Ángel Muñoz, Figo, Piqué, etc.), pero no, no pude entrar. También decían que Rihanna trajo como 5 carpas de camerino y que Bon Jovi pidió veinte toallas iguales de color amarillo. Cuando David Guetta hubo puesto 5 canciones suyas con un cd y hablado un poco en inglés me marché, que al día siguiente sería muy duro volver, los conciertos eran por la mañana.
El domingo fue el día más duro, era el día de la familia, tuvimos que estar al sol, en el desierto, poniendo pulseritas a los niños para que no se perdieran. Y había una pregunta generalizada entre los padres que habían acudido engañados por sus hijos a las 12 de la mañana hasta la Ciudad del Rock: “¿Cuándo sale Hannah Montana?” y cuando les decías que a las 21h notabas que se les cambiaba la cara, me sentía hasta mal diciéndoles la verdad, y bueno, tampoco les quería comentar que no venía Hannah Montana, que ese personaje ya había muerto, que quien venía era Miley Cyrus, que se prepararan para la nueva Britney Spears. Y así fue, salió con el mismo traje de Rihanna el día anterior, y ahogándose, y restregándose con algunos del ballet… Esas niñas de cinco años no lo merecían…Por cierto, se comenta que salió David Bisbal…pero nadie le prestó mucha atención.
Para ir terminando, os comento RATM, que me estoy pasando. En resumen: todo lleno de gente extremadamente borracha, un tercio de los cuales tenía entrada y aprovecharon estar en el interior para correr sin camiseta por el recinto, mientras que, los otros dos tercios que habían quedado fuera, tras intentar pasar con entradas falsas y engaños varios, decidieron intentar tirar los muros de la Ciudad del Rock…Todo muy cívico…
Y esto es todo amigos, así es el Rock in Río y así se lo hemos contado. Ya se presentó el evento para 2012, así que ya saben, cualquier volnuntaria puede ser la becaria.
Os dejo con el fin de fiesta:
Conclusión de Hoy: “Papás del mundo, que no os timen vuestras hijas, Hannahs Montanas en potencia”