En la avenida de los Campos Elíseos está siempre situada la línea de meta de la última etapa del Tour de Francia. Además, la entrega de premios final se celebra al lado del Arco del Triunfo y por ello se ha convertido en un paseo mítico para el mundo del ciclismo. En la parte alta de la avenida, que empieza en la plaza «Charles de Gaulle» (antes plaza de la Estrella, «place de l'Étoile») se encuentran cines, tiendas de lujo y grandes almacenes, en particular uno dedicado a la música. La parte baja de la avenida, que desemboca en la plaza de la Concordia (donde se celebraban las ejecuciones), está rodeada de jardines y se encuentran varios edificios públicos majestuosos: el Palacio del Descubrimiento («Palais de la Découverte»), el Pequeño Palacio y el Gran Palacio, así como la Universidad París IV.
Los Campos Elíseos son parte del eje histórico de París, que se prolonga por el Jardín de las Tullerías hasta llegar al Museo del Louvre.
Por el lado opuesto del Arco de Triunfo la avenida de la Gran Armada y la Avenida Charles de Gaulle prolongan los Campos Eliseos. En losaños noventa se construyó en este mismo eje el Gran Arco, en el barrio moderno de La Défense, uno de los centros de finanzas más importantes de la Unión Europea junto con Fráncfort del Meno.El nombre Campos Elíseos viene de la mitología griega, donde designaba la morada de los muertos reservada a las almas virtuosas, el equivalente del paraíso cristiano. Para acceder a él debían beber en el río Lete, que les haría olvidar su paso por el infierno.Desde esta avenida puede verse maravillosamente el arco del triunfo. Como le puedes ver en esta imagen.
La vista de noche es magnifica.
En esta imagen vemos nada mas y nada menos que el desfile de tanques y carros de combate franceses y estadounidenses luego de la liberación de París el 26 de agosto de 1944.
Allons enfants de la patrie Le jour de gloire est arrivé! Contre nous de la tyrannie L'étendard sanglant est levé! L'étendard sanglant est levé! Entendez-vous dans les campagnes Mugir ces féroces soldats? Ils viennent jusque dans vos bras Ecorger nos fils, et nos compagnes,
Aux armes citoyens! Formez vos bataillons! Marchons, marchons, Qu’un sang impur abreuve à nos sillons! Nous entrerons dans la carrière Quand nos aînés n'y seront plus! Nous y trouverons leur poussière Et la trace de leurs vertus. Bien moins jaloux de leur cercueil, Nous aurons le sublime orgueil De les venger ou de les suivre,