Ayer se estreno una de las series que más ganas tenía de ver esta temporada. Me había tragado todos los trailers posibles, los teasers y los artículos al respecto. Hablo de ‘El Ministerio del Tiempo’, una serie de ciencia ficción sobre viajes en el tiempo. El argumento es relativamente sencillo, desde la época de los Reyes Católicos se conoce la existencia de una serie de puertas que permiten viajar a distintas épocas de la Historia. El Ministerio tiene la tarea de evitar que haya alteraciones a la historia tal y como la conocemos. Una serie muy ambiciosa y bien realizada de la mano de los que hicieron ‘Isabel’ o ‘Víctor Ros’.
Ayer, la serie tuvo una buena acogida, no fue lo más visto de la noche, pero tuvo unas buenas cifras de audiencia. Empezó tarde y acabó tarde. A partir del 2 de marzo, se emitirá los lunes a las 22:15, un mejor horario. A raíz de este inicio con buen pie ha salido un pequeño debate sobre la calidad de la ficción en este país. Ya sabemos cómo solemos hablar de estos productos en España. Normalmente ponemos el producto extranjero por encima del patrio y cada vez hay más razones para sacar pecho de lo que se hace en este país.
Personalmente, me sorprendió mucho ‘Isabel’. La serie, que cuenta la vida de Isabel I de Castilla, la Católica, tenía una factura muy buena y, además, es muy interesante. Yo la recomiendo encarecidamente. Una ficción histórica con ritmo y buen guión.Salvando las distancias, la comparo con ‘Juego de Tronos’, pero conociendo lo que va a pasar de antemano. ‘Isabel’ no es el único ejemplo de buena ficción en televisión. Hay thrillers como ‘Bajo Sospecha’ de Antena 3 que mantienen un nivel muy alto. Así como ‘Velvet’ que técnicamente tiene una pinta muy buena. Esa recreación de la época es increíble, aunque ahí falle la actuación de cierto actor protagonista.
Sin ir más lejos, este año he estado más interesado en las películas de los Goya (‘La isla mínima’, ‘El niño’, ‘Loreak’ y ‘Ocho apellidos vascos’) que en los Oscars, donde la única que me llama realmente de las nominadas a mejor película es, precisamente, la ganadora: ‘Birdman’. No es el primer año que me pasa. Recuerdo que Jose A. Pérez Ledo (@mimesacojea) recomendó por Twitter, en su día, ‘Grupo 7′. Y como de él me fío y además trabaja en ese mundillo, la vi. Me encantó. Fue como descubrir que en España con medios se pueden hacer cosas muy interesantes. Y a partir de esa película, he estado más receptivo a la ficción de este país.
Por eso me alegro mucho que haya gustado tanto ‘El Ministerio del Tiempo’. Una serie de ciencia ficción, que hacía falta, con mucho humor y muy autorreferente. Basta el chascarrillo de Rodolfo Sancho cuando dice “¿me estás diciendo que la máquina del tiempo existe y es española?” que, por cierto, es justo lo que me planteaba. El programa posterior a modo de making of también ayudó a enseñar la cocina y todo el trabajo que ha llevado la producción de la serie.
«Seguro que llega antes andando antes al SXVI que tú a casa en metro» Me troncho con El Ministerio del Tiempo, su punto cachondo es lo mejor
— Adriana Izquierdo (@Adriii) February 25, 2015
Como digo, pinta muy bien. Espero que continúe por varias temporadas y abra la puerta a más propuestas arriesgadas y bien elaboradas como esta. Es posible que ‘El Ministerio del Tiempo’ abra los ojos a muchos espectadores y empecemos a creer que se puede entretener con calidad en una televisión pública o privada. Me levanto a aplaudir porque es lo que se merece. Plas, plas, plas. Con ganas de ver el segundo capítulo.