Estas cabañas se han instalado en la zona alta del complejo y todas disfrutan de unas vistas maravillosas sobre el Embalse del Guadalcacín y el Parque Natural de los Alcornocales. Esta fase inicial de alojamientos singulares es el comienzo de un proyecto más ambicioso, perfectos para quienes desean vivir una experiencia en plena naturaleza pero sin renunciar a las comodidades que puede ofrecer un establecimiento hotelero de lujo.
Esta tendencia turística está causando sensación en todo el mundo; los adeptos al glamping cada vez más en aumento y disfrutan de todas las sensaciones de una acampada al aire libre, con una opción más sofisticada que la incomodidad de una tienda de campaña y un saco de dormir; estos se convierten en yurtas, tipis, lodges, cabañas en los árboles o flotando en un lago que gozan de todas las comodidades para una estancia inolvidable en unos entornos paradisiacos. Experiencias originales y poco comunes, actividades complementarias al aire libre y ofertas que cautivan a los turistas a partir de las excelencias del bosque son algunos de los reclamos de esta nueva forma de viajar.
El Tajo del Águila, por su ubicación, entre los parques naturales de Grazalema y Alcornocales, reúne todos los requisitos paisajísticos y medio ambientales para combinar una experiencia única junto a la experiencia y el buenhacer de la Cadena Hace, que recordemos son propietarios de los Hoteles Playa de la Luz y Duque de Nájera, en Rota, el Hotel Jerez & Spa, en Jerez de la Frontera, y el Guadacorte Park en la Bahía de Algeciras.
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