La cámara sangrienta es una colección de diez relatos basados en cuentos de hadas, en especial de Charles Perrault, pero también de Jeanne Marie Leprince de Beaumont, del folclore europeo y de la radionovela, con claras influencias de la narrativa del Marqués de Sade. Angela Carter afirmó que se sentía impelida a escribir "cuentos góticos, crueles, narrativas fabulosas que tratan directamente del imaginario del inconsciente". Pero Carter no se limitó a versionar los cuentos, sino que los recreó por completo "al extraer el contenido latente de los cuentos tradicionales y usarlo como punto de partida de nuevas historias; y el contenido latente es violentamente sexual". Estos relatos ahondan en temas de feminismo, en los roles de la mujer en las relaciones, en los aspectos inmorales y perversos del matrimonio y el sexo, y en el equilibrio de poder. La ilustradora Alejandra Acosta ha puesto su talento en esta edición, convirtiendo este clásico en una obra, si cabe, infinitamente más bella.
Datos técnicosEditorial: Sexto Piso (2017)
Nº de páginas: 208
Formato: Tapa blanda / Versión Kindle
ISBN: 978-8416677450
Precio: 19 € / 15,19 €
ImpresionesEs este el título que escogí para leer el Día de los Difuntos, pero las previsiones de tiempo que aventuré quedaron desmentidas: son muchos los títulos que me han llegado y he jugado a la ubicuidad sin haber salido airoso. En cualquier caso, si aquí estamos es porque llegó a buen puerto la revisión de este clásico, o debería decir clásicos, de la literatura de terror gótico de la que Carter es catedrática.
El mismo año que en España nos congratulábamos por una Exposición Universal sin precedentes o unas Olímpicas llamadas a ser recordadas durante siglos, fallecía con tan solo 52 años esta narradora y periodista inglesa llamada a convertirse en clásico y referente del género. Son muchas las versiones de su obra: sobran las palabras. La mía es la cuidada edición de Narrativa Sexto Piso, en la que contaron con las impresionantes ilustraciones de la artista chilena Alejandra Acosta y la soberbia y erudita traducción de Jesús Gómez Gutiérrez, toda una delicia. Se trata de un libro ilustrado, aunque los puristas pueden considerarlo un álbum pictórico narrado. Desde luego, un ejemplar para guardar como celosos coleccionistas.
Negro y rojo. Rojo y negro. No hacen falta más colores, a excepción del blanco, el contraste obligado para construir este edificio intrigante que es en realidad una compilación de relatos basados en clásicos de la literatura, pero tamizados por ese filtro del que hace gala la eficaz e imaginativa autora en la que siempre habrá tientes de fantasía y, por qué no, sexo filtrado y sutil, su seña de identidad, también plasmada en obras de la altura de El doctor Hoffman y las infernales máquinas del deseo o Noches en el Circo.
El lector se encontrará con textos ágiles y eruditos, no siempre asequibles en plenitud, en los que la licantropía y el vampirismo desempeñarán un papel, si no protagonista, sí que secundario destacado. Bosques oscuros y asfixiantes, castillos laberínticos, sirvientas desagradables y hasta mininos inteligentes harán las delicias de los amantes del género.
El primer relato, La cámara sangrienta, que le cede su título al volumen, nos retrotraerá a ese tiempo indefinido que identificaremos con la época victoriana sin tener en cuenta los datos que nos sean revelados. Intrigante historia de terror que termina... Como debe hacerlo. Pero no saciados con el menú, revisitaremos la historia de la Bella y la Bestia, no una, sino varias veces. También haremos lo propio con la leyenda del Hombre Lobo, la de Drácula, y los cuentos de Caperucita Roja o el Gato con Botas.
No lean este libro con sueño. Hay que estar atentos a los detalles. No pasen de largo por las ilustraciones, preciosas, misteriosas, inquietantes. No tengan prisa por llegar al final; ya les digo que al terminar un relato les espera uno mejor. Acaricien las páginas y aspiren el aroma de un libro embriagador y terminen con el ritual de los fines no deseados: devuelvan el libro al lugar que le han reservado en la biblioteca y esperen unos meses para tomarlo de nuevo en sus manos y volver a reconocer que Angela Carter nos conquista con su escritura.
Reseñado por Francisco Javier Torres Gómez
Si quieres hacerte con un ejemplar lo puedes hacer desde el siguiente enlace: La cámara sangrienta