Debo confesar que mi relación con los "borrachitos", "curados" o como les conozcan, no es de las mejores, será porque como no le entro al asunto pues, sobre todo porque desde chica me daban susto, esa capacidad de entrar en una dimensión tan alejada a la que muestran cuando están sobrios me daba más miedo.
Pero LA CANCION DEL PULQUE es otra cosa, si bien el que se emborracha o cura con pulque, esperemos que sepa lo que está haciendo, porque las consecuencias son mucho más fuertes. Porque alrededor del pulque hay todo un tema de la cultura nacional, de México, del maguey, de los campesinos y obviamente de lo que les pasa a los hombres y mujeres, cuando se reúnen en las cantinas y toman su pulque de sabor piña, limón, durazno, fresa y entre más toman más se desahogan y cuentan sus cuitas de amor, de desamor, de abandono y soledad.
Recuerdo que hace años atrás, en compañía de unos amigos mexicanos que obviamente no le entraban al pulque, fuimos a una "pulqueria" camino al Desierto de Los Leones, digo que mis amigos no le entraban, porque de hacerlo, hubiera sabido que las mujeres no deben entrar en los antros de varones, que para eso, hay lugares donde sí. El asunto es que igual entramos y así de rápido nos sacaron, no perdonaron ni mi apariencia de gringa ni la estupidez de mis amigos. Pero de lo poco y nada que vimos y lo poco y nada que probamos (por suerte), hay que decir que es un ambiente especial, por no decir heavy y que hay que estar en la misma frecuencia para poder aguantar ahí más de un ratito. Hablando en terminos turisticos, podriamos catalogarlo de "curioso", pero no para quedarse "curioseando" demasiado rato.
Pero en materia del documental, que uno lo ve a través del televisor (en mi caso) y otros de la pantalla grande, además de curioso se torna pintoresco y finalmente tipico de México, porque el pulque proviene de las entrañas del maguey, de donde mismo sacan el tequila, de hecho los entendidos en pulques, dicen que es el "elixir del maguey", ellos sabrán más, porque cuando lo probé le encontre un sabor fermentado fuerte que si no fuera ñorita, lo hubiera escupido ahí mismito.
La historia también como su nombre lo dice, tiene mucho de música, de canciones, porque en cada cantina que se preste de serlo, tiene que haber sonido, en este caso, la música la pone un asiduo a la cantina, al pulque y que entre sorbo y sorbo se inspira y va lanzando canciones sobre lo que en el lugar sucede y por supuesto, sobre sus dolores en amores.
Y aunque mis comentarios suenen a gringa con asquito, confieso que me gusto el documental, lo vi sin chistar y me reí más de una vez, encontré que estos recursos de memoria sobre las raíces de un pueblo y sobre todo si el pueblo en cuestión es mi amado México, son muy necesarias para que las tradiciones se mantengan lo más intactas posibles, claro que hay que tomar en cuenta que como bien dicen los entrevistados, algún máldito día los magueyes se extinguiran y ahí si que vamos a ver de a como les toca a los adictos al extraño manjar.
Además que la película cuenta con la fotografia de Everardo González, quien también es su director y que tiene un ojo capaz de captar todas las cosas realmente hermosas de México, como lo son por lo general, las cosas simples, sencillas como los cerros, la sombra de una persona, los cielos, un horizonte de campo.
Totalmente recomendada!!
SINOPSIS:
Los hombres de las pulquerías pertenecen a un trozo de la humanidad inexistente en los planes y proyectos macroeconómicos de México; son hombres del fin del mundo, con sueños atemporales, hombres de un tramo indefinido de la historia; su sola supervivencia, al igual que la supervivencia de las pulquerías que habitan, habla de esa enorme y silenciosa resistencia cultural que es uno de los rasgos más notables de la identidad mexicana. Hombres de rasgos profundos, bebedores del néctar de los dioses que se enamoran de la vida. Mujeres resentidas con el destino por haberles puesto un mal amor en su camino. Canciones populares que dan ambiente a un grupo de borrachos, cábulas y albureros que llevan la música y el dolor en la sangre, en la mirada y en la forma de hablar. Migrantes que intercambian historias de la infancia y reconfortan el espíritu con un curado de fresa. Seres humanos que encuentran en la pulquería "La Pirata" un espacio de convivencia con su propia identidad.
CALIFICACION:
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FICHA TECNICA:
Titulo Original: La canción del pulque, México, 2003
Dirección y Guión y Fotografía: Everardo González
Categoría: Documental
Duración: 60 min.
Edición: Juan Manuel Figueroa
Sonido: Matías Barberis, Yuri Laguna, Antonino Isordia, Carlos Rossini, Paulo César Correa mi septima pasion