Cada año por estas fechas, desde hace 26, sale a escena el Grupo de Teatro "La Pernía". Historias que han compartido durante estos últimos años por Aguilar, Salinas, Barruelo, Celadilla del Río, Abia de las Torres, San Salvador de Cantamuga y Velilla del Río Carrión entre otros.
A mediados del pasado siglo, Gabriel González, el poeta local, más conocido como "el dios de la pernía", ya dirigía un grupo de teatro en esta comarca que luego llevaba la representación de obras como "el Tenorio" por los pueblos más importantes de la provincia. Entonces no existían las SGAE pero alquilaban las ropas en Valladolid, lo que les suponía un gasto de 500 pesetas.
Sesenta años más tarde, me complace participar a seguidores y amigos, que un grupo de jovenes con diferentes profesiones y de distintos pueblos, quitando horas de su trabajo se reúnen en al ayuntamiento de la Pernía para deleitarnos por estas fechas navideñas con historias escritas por Blanca... Es curioso. Cuando se publicó en el periódico un reportaje sobre alguna de sus interpretaciones, las SGAE se hicieron eco y cobraron por ello, cuando ellos no cobran entrada y lo dejan a voluntad del público, de manera que esto les dio pie para elaborar un guión propio de la mano de Blanca, hermana de Mila, una de las actuales componentes de este grupo por el que han pasado más de 60 personas.
Daniel, el actor local, que hereda el gracejo de los mejores comediantes y que siempre va más allá de lo que le dicta el papel echando alguna de las suyas; Alberto, nacido en San Juan de Redondo y viviendo en Lebanza; Alex, el propietario de esta casa, que en la vida real se mueve en la casa rural de la Venta Morena; Lidia, natural del pueblo cántabro de La Mata, que vive en Cervera y tiene raíces por su lado materno en San Juan de Redondo y que en esta ocasión interpreta junto a su primo Ángel a una pareja andaluza; Mila, natural de Santa María de Redondo, que vive en Cervera e Isabel, en el papel de Nekane, nacida en Bilbao, viviendo en Cervera y con raíces también por sus progenitores en San Juan de Redondo.
La historia lleva una doble intención, una especie de viejo Concejo por el que se convoca al vecindario como antaño y la interpretacion de unos vecinos, actores por un momento, que nos recuerdan el lugar en el que nos encontramos, las raíces, los familiares que dejamos aquí, la necesidad de refrescar la memoria a todo el mundo en este jardín de las delicias que es la montaña palentina.
© De la sección "La Madeja" en Diario Palentino, 2016