Revista España
El Salón Dorado de la casa de Pilatos es una estancia de poco menos de cincuenta metros cuadrados que está situada en el extremo este del edificio colindando con el llamado Jardín Chico.
Del espacio público de la cámara grande, que era el Salón del Pretorio, se accede a través de una pequeña puerta de taracea mudéjar, y utilizaremos como salida a un pequeño corredor que da acceso a través de un vano flanqueado por robustas columnas de mármol rosa a una estancia que debe ser el núcleo más íntimo de la casa de verano de Don Fadrique y que en los documentos del siglo XVI se denominaba ya Sala Dorada. Una mirada al techo permite comprender la razón del nombre y de su pervivencia.
El nombre le viene dado a raíz del color con que se policromó el artesonado mudéjar que lo cubre.
Prácticamente es una estancia aislada del resto del recinto al que se une por un estrecho corredor llamado Corredor de Zaquizamí (una palabra árabe que indica una habitación con un techo frágil, bien referido al artesanado del techo, bien referido a la fragilidad de un techo de madera) que le une al Salón del Pretorio.
Los artesonados de casetones que cubren tanto el corredor como la Sala Dorada, de idéntica estructura al del Salón del Pretorio, aunque adornados únicamente de piñas de mocárabes doradas, datan como hemos dicho de 1539 y por tanto, son los más modernos de cuantos hay en el Palacio, pues en las obras posteriores no sólamente no se empleó este tipo de armadura, sino que se desmontaron o juntaron algunas de las existentes.
Tanto la Sala Dorada como el corredor del Zaquizamí albergan piezas destacadas de la colección que formó en Italia el primer duque de Alcalá. Sobresalen del conjunto dos bajos relieves de mediados del siglo I después de Cristo, colocados uno frente al otro que conmemoraban la victoria de Augusto y de su general Agrippa el 31 antes de Cristo sobre las fuerzas reunidas de Marco Antonio y Cleopatra, en la batalla de Actium, triunfo que marca simbólicamente el fin de la República Romana y el comienzo del Imperio.
Son obra de un taller de primera fila de la Roma de los alvores del Imperio, o sea del final del Imperio de Augusto o principios del de Tiberio cuando se está formando un lenguaje clasicista inspirado en la herencia griega.
Altorrelieve con desfile religioso. Mármol blanco labrado y pulimentado. Medidas: 107 cm alto x 113.5 cm ancho. Siglo I d.C. Estilo clásico.
En las paredes del salón podemos ver dos bajos relieves, uno de ellos dedicado al César Augusto para rememorar la victoria en la batalla naval de Actium y enaltecer la figura del emperador.
En las paredes también encontramos algunas máscaras, algunas piezas separadas de las esculturas originales y algunas metopas de un palacio renacentista del siglo XVI que representan unas caras grotescas.
Altorrelieve con desfile militar. Mármol blanco labrado y pulimentado. Medidas: 106 cm alto x 124 cm ancho. Siglo I d.C. Estilo clásico.
Pero sin duda, la figura que llama la atención es esta escultura de "Ninfa dormida" que está bajo uno de los ventanales con arco que dan al jardín. También es una escultura renacentista del siglo XVI.
Finalmente me gustaría que os fijarais en esta puerta de la foto que es una de las joyas del plateresco español (arte renacentista pero con más ornato), sobre la cual está el escudo de la familia nobiliaria.
El año 1539, el último de la vida del marqués de Tarifa, posiblemente porque presintiera su fin, se registró una actividad febril en las obras del Palacio. En aquel año, el maestro carpintero Cristóbal Sánchez se comprometió. según reza el contrato. al enmaderamiento de la cuadra y retrete de la Sala Dorada y de un corredor que se hace en el jardín.
Aunque todavía firmaría algunos contratos más para la decoración de otros espacios, la referencia a la galería en construcción indica que son estas las últimas estancias que agregó el marqués de Tarifa al palacio querido de sus padres.
Casco y maza añadidas a la Palas Pacifera del patio principal.Medidas: Casco: 66 x 48.5 x 62 cm; maza: 126 cm largo.Francois Duquesnoy. Siglo XVII.
Dos metopas. Mármol blanco labrado y pulimentado. Medidas: 48 cms de alto por 48 cms de ancho.Siglo XVI. Estilo clásico.
Sigue leyendo >>>
Sus últimos artículos
-
Vistas de la Plaza del Triunfo desde el Archivo de Indias.
-
Exposición "El Salvador y España. Un pasado común" (7): la Independencia.
-
Exposición "El Salvador y España. Un pasado común" (6): la Sociedad.
-
Exposición "El Salvador y España. Un pasado común" (5). Infraestructuras.