Revista Cultura y Ocio

La casualidad me lleva otra vez a séneca

Publicado el 15 febrero 2015 por Wig
LA CASUALIDAD ME LLEVA OTRA VEZ A SÉNECAOtra vez llega Séneca, y si hace unos días era "ser náufrago antes de navegar", ahora es " no hay viento favorable para el que no sabe donde navega". Otra vez vienen del antaño de los tiempos para darnos una alusión marinera sobre el sentido de la existencia. Nunca debimos de dejar de estudiar filosofía como asignatura obligatoria. Todo ronda sobre las ciencias y la tecnología, y a nadie se le ocurre que detrás de todos esos descubrimientos científicos y tecnológicos se encierra un gran elenco de conceptos filosóficos. La casualidad nos lleva de un lugar a otro y nosotros les damos el sentido que se merece, porque para el cerebro la casualidad es difícil de aceptar y comprender. Es curioso que Séneca vuelva. ¿Casualidad? O cierta afinidad. Sea lo que fuere, no creo en saber a dónde navegar como parece obsesionar a los filósofos de la antigüedad; me quedo más con navegar a secas y ver a qué isla me lleva, desierta o no. Me quedo con fluir como una ola o una onda hertziana con sus subidas y bajadas de ánimo. Sin subir ni bajar mucho, por supuesto. La casualidad me da inspiración, y jamás he rechazado una oferta de ella, pues justifica su propia existencia.

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