La cena de los acusados

Mediados de los años trenta.
El matrimonio Charles es una pareja sofisticada y adinerada que pasa unos días  en Nueva York.
Nick Charles (William Powell) es un detective retirado pero de gran renombre y Nora (Myrna Loy) su flamante  y rica esposa. Ambos se complementan y se divierten con su agitada vida social, pero sobre todo tienen la habilidad de meterse en líos.
Esta vez todo se origina con la desaparición de un inventor y amigo de Nick y la  muerte de su amante, lo que provocará que por insistencia de su divertida mujer Nick decida investigar por su cuenta.
La Cena de los Acusados (The Thin Man, 1934) fue de las primeras comedias detectivescas del cine, y acabaría convirtiéndose en una saga de seis películas  (iremos comentando las  cinco restantes, no os preocupéis) gracias a la indiscutible química de los dos protagonistas y que está basada en el libro del reconocido Dashiell Hammett.  
Alabada por su acidez y su incorrección, contiene diálogos con altas dosis de humor negro y personajes de lo más surrealistas, que en la actualidad sería imposible trasladar a la gran pantalla (estamos en la década que herir sensibilidades está a la orden del día...en esta casa siempre nos quejamos de que se pierda el sentido del humor).

En cuanto a los personajes principales, el protagonismo está tan dividido entre la curiosa pareja como por todo el alcohol que beben (que no es poco), y  que será otro personaje más de la película  (como si de un brebaje que despertara las habilidades mentales de Nick se tratase). Mención especial el perro de Nick y Nora,  Asta, un can  miedica que tiene varias escenas divertidísimas.

La Cena de los Acusados es una película desenfada y muy divertida (nos parece la abuelita de The Artist, película del año para los integrantes de la Wasabi Manor), y, si no la habéis visto, ya solo os diré una cosa más: ¡A por ella!


Por su tono y por las risas que provoca le damos seis etílicos wasabis.

Nos hemos enterado de que Rob Marshall planea un remake con Johnny Depp en el papel de Nick Charles (yo no sería nada optimista al respecto... que ya sabemos como se las gasta el bueno de Rob...).
Seguiremos con más cine noir y vintage; saludos wasaberos.