Jorge Enrique Lage entrevista a Miguel Coyula (fragmentos) 6
…Estoy en contra de la censura, que como hemos visto en lo sucedido con ese filme en el Havana Film Festival de New York, se expande más allá de los límites geográficos de la isla por intereses extra-artísticos. O sea, que la política lo toca todo.
Todo este recrudecimiento se remonta a la censura de El rey se muere en 2015. Muchos defendieron la obra de Juan Carlos Cremata diciendo que no entendían que los censores interpretaran que el rey era Fidel; o sea, utilizaban el lenguaje del régimen para tratar de “sobrellevar” el problema, cuando estaba claro que el referente inmediato era él. Lo que ameritaba decir era: “Sí, es Fidel. ¿Y qué?”.
En la medida en que los artistas se tracen el esquema mental de “hasta donde puedo llegar”, no existirá un arte verdaderamente independiente. Esto termina afectando no solo el contenido sino también la forma.
La libertad tiene que ser absoluta, para poder tomar riesgo y despegar. Nada puede ser sagrado. Por lo menos así veo yo el arte. Nunca me ha interesado formar parte del juego de la política, de la religión, de la sociedad de consumo, de las drogas. Parece una minucia, pero un cineasta interesado en temas sociales o políticos que no pueda poner a un personaje diciendo “¿Cuándo se morirán Fidel y Raúl?”, una frase tan común en los hogares de este país, incluso con variaciones mucho más agresivas de la misma, es algo sintomático de una disfuncionalidad total. El artista documenta su tiempo, pero viendo la cinematografía cubana hecha en la isla en los últimos sesenta años, tal parece que ningún cubano ha vocalizado jamás una pregunta semejante. Recientemente me dijeron, a modo de consejo: “Te puedes meter con la cadena, pero no con el mono, si no te quedas fuera del juego”. A lo que yo respondí: “¿Y quién dijo que para mí esto es un juego?”.
Es preciso que los realizadores estén dispuestos a defender su obra a fondo, pues una actitud de medias tintas solo facilitará un pisotón en cámara lenta, que inevitablemente se reflejará en obras posteriores. No se puede ceder ni un ápice.
Pero, volviendo a tu pregunta, el más reciente caso de censura ha sido con Nadie, el pasado 15 de abril, cuando la Seguridad del Estado y la PNR bloquearon la entrada a la Casa Galería El Círculo, donde se iba a proyectar. Esta es la censura a nivel no de máscara institucional sino ya abiertamente gubernamental, de violación total de un espacio privado a través del despliegue de fuerzas policiales.
Muchas personas fuera de Cuba me preguntan que cómo es posible que ningún intelectual cubano residente en la isla se haya manifestado públicamente sobre el suceso. La película tuvo su estreno internacional en el Festival de Cine Global Dominicano, donde obtuvo el premio al mejor documental, pero ha sido ignorada por los críticos de la isla. No se sabe si es buena, si es mala, si los dejó indiferentes, o si sencillamente temen escribir sobre ella, pues es muy difícil realizar una valoración crítica de Nadie sin mencionar a Fidel Castro. Y esa es la línea que casi nadie se atreve a cruzar hasta la fecha. La banda de rock Porno para Ricardo es una de las pocas que se han atrevido a hacerlo de manera tan frontal y, bueno, el precio a pagar es que no los dejan tocar en Cuba.