Hola amigos! Parece ser que Blancanieves existió!
Según el historiador Dr. Karlheinz Bartel, la auténtica Blacanieves se llamaba Maria Sophia Margaretha Catharina von Erthal y nació el 15 de junio de 1729, en un pueblecito llamado Lohr, al lado del río Meno, en la Franconia alemana.
Su padre era Philipp Christoph von Erthal, entre 1719 y 1748 fue condestable del territorio de Kurmainz, en Lohr. Por sus dotes diplomáticas, viajaba frecuentemente, era como un ministro de Asuntos Exteriores del Ducado. Por eso, se relacionó con reyes y reinas de toda Europa.
M.B. Kittel, el cronista de la familia Erthal, describía a Maria Sophia como“un ángel caritativo y bondadoso”, “activo contra la pobreza y la indigencia”, por eso los habitantes de Lohr le tenían mucho cariño, además, sufría ceguera parcial desde la infancia, producida poe las secuelas de la varicela.
En 1741, murió la madre de Maria Sophia, y dos años después, su padre se casó con la Condesa Imperial de Reichenstein: Claudia Elisabeth Maria von Venningen.
La residencia familiar era el castillo de Lohr:
castillo de Lohr
El “espejo mágico” que hablaba
Además, en el castillo también se encuentra el espejo que hablaba. Se puede visitar en el castillo, que se ha reconvertido en el Museo del Spessart.
Mide 1,60 m y se puede leer en el lateral “Amour Propre”, fue un regalo del padre de Maria Sophia a su segunda esposa: Claudia Isabel Von Reichenstein, nacida Condesa Imperial de Reichenstein.
En la época se puso muy de moda este artilugio acústico, se trata de un espejo que si te colocas delante y hablas, el repite cada una de tus palabras, ésto se debe a la reverberación.
La relación entre Maria y su madrastra no fue tan mala como se describe en el cuento, pero es sabido que Claudia siempre benificiaba a los hijos de su primer matrimonio, menospreciando a la verdadera Blancanieves.
Además “los siete enanitos que picaban y cavaban”, eran en realidad niños desnutridos y envejecidos prematuramente por el trabajo en las minas de hierro, en las propiedades de los Von Waldek. Debido a su pobreza, estos niños vestían largos abrigos y gorros muy parecidos a aquellos con los que se suele representar a los siete enanitos. En 1750 picaban allí unos 500 mineros en busca de plata y cobre.
Fuentes:
http://es.wikipedia.org
http://suspirosdecaramelo.blogspot.com.es
http://historiayvarios.blogspot.com.es
http://pedromariafernandez.blogspot.com.es
http://www.fusion-freak.com