La chispa de la vida

La última película de Alex de la Iglesia, y la primera tras haber abandonado el cargo de presidente de la academia de cine. Un drama con ciertos toques de comedia, que se transforma en una crítica a los programas basuras de la televisión, y en concreto a los de determinada cadena española, que queda bien claro con su "Antena 5".
Roberto (José Mota), es un publicista en paro, que tras su última y fracasada entrevista de trabajo, se desplaza a Cartagena, para localizar el hotel en el que paso la luna de miel hace 20 años junto a su esposa. El hotel ha desaparecido, pues se han encontrado unas ruinas romanas en la zona, y todo ha quedado convertido en un Museo. Allí, sufre una caída accidental que le deja la cabeza atravesada por una barra de hierro. Quedando consciente, y tras llegar los servicios médicos y toda la prensa, empieza a pensar que el espectáculo que esta dando, puede ser aprovechado para relanzar su carrera y su vida.
Aunque en un principio, la película parece ser un reflejo de la sociedad actual de crisis en que vivimos (por lo del para), la película gira por completo en cuanto Roberto, es consciente de que puede aprovechar los medios, hacia la crítica sobre la telebasura. Una crítica, que sin duda se queda corta, pues cierto panorama televisivo español, da pena, y sin duda supera lo que se nos muestra en la película. Y desde luego, también contiene algo novedoso en el cine de Alex de la Iglesia, y es el amor familiar. Esto queda perfectamente reflejado, y resulta del todo convincente, a pesar de estar encarnado por personas tan diferentes como José Mota y Salma Hayek.
La elección de los protagonistas, no ha podido ser más acertada. Por un lado José Mota, aunque no borda su interpretación, desde luego demuestra ser un capaz actor dramático. De hecho, los pocos momentos cómicos que corren a lo largo del film, no parten de su personaje. Y Salma Hayek, esta perfecta y creíble como amante  esposa de Mota. En el resto del amplio cast, podemos destacar a Juan Luis Galiardo (actor que no me podía imaginar nombrarlo en este blog), Blanca Portillo, Fernando Tejero, Antonio Garrido y Carolina Bang. Ademas. la película e ha nutrido con un montón de cameos, con actores muy populares del cine español, y que os animo a ir descubriendo.
En definitiva, una película que empieza siendo una cosa, y acaba en otra muy distinta, y que a pesar de no resultar redonda, bien merece un visionada, a lo que ayuda que a penas supere la hora y media de metraje.