Las recetas y la vida: el pan
Las mismas pautas que utilizo para la vida las aplico en la cocina y la verdad me funcionan. Es decir, nadie tiene la fórmula mágica para que las comidas o las decisiones que tomemos sí o sí salgan bien, siempre hay un margen de factores desconocidos o con los que no contábamos, por eso la autorreferencia es la que nos va a guiar. Una receta puede tener las cantidades exactas de cada ingrediente que figuraban en el modelo, que vas a aplicar paso a paso y a conciencia, pero así y todo puede quedar diferente. Por eso, no esperes ser igual a otro y crear réplicas si no le pones el toque propio te estás perdiendo de algo: de crear.
Cada vez que busco recetas nuevas las sigo solo a grandes rasgos, porque a medida que las voy preparando les agrego ingredientes que en el momento me parecen atractivos o les quito otros, lo mismo hago con las cantidades. Hay veces que las cosas salen bien y otras veces no tan bien, pero me gusta experimentar, porque me permite aprender donde están los límites, y me llevo la grata sorpresa de saber que a veces ni siquiera los hay. Ante la aceptación que tuvo mi publicación en las redes acerca del pan casero, aquí está la receta. Antes que nada les aclaro que lo hice totalmente siguiendo mis instintos, porque no respeté para nada las medidas que me indicaron, simplemente puse las que yo iba viendo sobre la marcha. Es una receta muy fácil, y espero que les salga riquísimo como este y que la disfruten.
500 grs de harina Levadura (a ojo) Agua tibia Semillas de calabaza, girasol y pasas de uva. 1 cucharada de sal
- Colocar en un bowl la harina en forma de volcán con un agujero en el medio donde vas echar la levadura, (yo usé un sobre de levadura seca que antes hay que mezclar con agua tibia)
- Echar la sal
- Empezar a mezclar con una cuchara, mientras tanto verter el agua de a poco hasta que se forme una masa homogénea. Si vez que se te va la mano con el agua le pones más harina y listo, es cuestión de ir jugando con los elementos.
- Quitar la mezcla del bowl y amasar con las manos hasta formar una pelota-Dejar reposar 30 minutos, volver a amasar y dejar reposar otros 30 minutos más. -Encender el horno a 220 y hornear durante unos 45 minutos, hasta que vea la corteza va tomado colorcito
Y voilà! a disfrutar.
Candela .
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