La cocinera de Himmler

El siglo XX pasará sin duda a la Historia por sus avances en tecnología, medicina y ciencia; pero también por el horror de sus regímenes totalitarios, sus genocidios y sus dos guerras mundiales. Demasiadas vidas truncadas por tanta crueldad, demasiadas vidas que a pesar de los despojos de la Historia continuaron su sinuoso camino. Una de esas supervivientes es Rose, nuestra heroína. A lomos de esta cocinera cínica y vengativa, emprendemos nuestro singular vuelo por 105 años de Historia mundial y de vida de nuestra protagonista.
He de confesaros, pajaritos, que esta novela me atraía y despertaba mis dudas a partes iguales. Sin duda era su argumento el desencadenante de estos dos impulsos contradictorios. ¿Una mujer que ha sido testigo y ha sufrido el genocidio armenio, el nazismo y el maoísmo? No la podía dejar escapar. Pero, ¿alguien que se toma la justicia por su mano y mata a sus enemigos sin ningún remordimiento? ¿Es esa la enseñanza que nos deja este siglo de horrores? No considero necesario identificarme con los personajes de un libro para poder empatizar con ellos, dejo en mente de su autor que obre ese pequeño milagro. Además, esta novela se nos vendía como una historia divertida, irónica y descarada. Así pues, aparqué mis dudas a un lado y tomé impulso para el vuelo que iba a emprender.

Portada de La cocinera de Himmler

"La cocinera de Himmler" se inicia en la era actual para luego ir desgranándonos todos los acontecimientos que ha vivido su protagonista. Es la propia Rose la que decide escribir un libro y contarnos su vida, "Un libro para celebrar el amor y prevenir a la humanidad de los peligros que corre. Para que no viva jamás lo que yo he vivido." Nada más iniciar el capítulo en el que Rose empieza a contarnos su historia me digo, ya está, pajarita, no te has equivocado, te has embarcado en el viaje correcto. Pero no fue más que una vana ilusión, un espejismo fruto del reconocimiento de un buen escritor por parte de una experimentada lectora. Porque si algo he de reconocer tras concluir este libro, es que Franz-Olivier Giesbert cumple su trabajo impecablemente y que me llevo varias frases de esta novela. Lamentablemente este espejismo se da demasiado pronto y transito por el resto del desierto emocional que es esta novela buscando un nuevo reflejo que no hallo de ese talento narrativo. Ya os digo, pajaritos, que de este periplo tan sólo me llevo varias gemas encontradas entre su árida y estéril arena.
Considero que la literatura es un catalizador de emociones. Tiene que provocar algo, positivo o negativo, pero algo. "La cocinera de Himmler" no me ha provocado absolutamente nada, es lo que yo llamo un libro 'sin alma'.
¿Divertida, irónica y descarada? Contempla en parte el descaro y la ironía en sus páginas, pero en ningún momento me ha parecido una historia divertida. ¿Y los propósitos de Rose al iniciar 'su' libro? ¿Un canto al amor? Rose no quiere a nadie más que a sí misma, tan sólo está interesada en 'salvar su culo' (y perdonadme la expresión, pajaritos, pero estoy segura de que si Rose escribiese esta reseña utilizaría estas mismas palabras) Tal vez quiso a sus hijos pero su empeño en dejarlos al margen de su narración no ayuda a su humanización. Rose no alberga sentimientos por nadie, nos cuenta que se ha enamorado locamente varias veces pero no nos lo muestra, no nos ofrece nada. Puede que el problema estribe en ese punto de cinismo del que se ha querido impregnar toda la novela. Tanto empeño en erigir a Rose en icono de la superviviente indestructible que se pone el mundo por montera ha terminado por 'desalmarla'.
En cuanto a su pretensión de evitar que nadie viva lo que ella ha vivido, que la Historia no pase por nadie como ha pasado por ella, yerra nuevamente. La Historia en esta historia tan sólo es un pretexto para lo avatares sufridos por nuestra díscola cocinera. No es que esperase una novela histórica, habría sido un desvarío por mi parte confiar en albergar 105 años en poco más de trescientas páginas; pero si de lo que se trata es de ofrecernos un fresco histórico del siglo XX a través de la ácida mirada de su protagonista, esta ha sido una decepción más. Y olvidaros, por supuesto, de que la humanidad obtenga alguna lección de la vida de Rose tal como ha sido contada.
Me da rabia. Vuelvo a reiterar que "La cocinera de Himmler" es un libro bien escrito. Me quedo con una sensación de fracaso y miopía, de no haber sabido ver el alma ni de Rose ni de este libro. Porque por supuesto que no existen los libros sin alma. Tan sólo existen libros para ciertos lectores y lectores para ciertos libros. Y ni este libro era para esta lectora ni esta lectora para este libro o, simplemente, no era nuestro momento.
Ficha del libro:
Título: La cocinera de Himmler
Autor: Franz-Olivier Giesbert
Editorial: Alfaguara
Año de publicación: 2014
Nº de páginas: 344

Más sobre Franz-Olivier Giesbert y "La cocinera de Himmler"

No sólo de literatura y de sus novelas vive Franz-Olivier Giesbert. Su trabajo periodístico también es muy reconocido, siendo autor de varios ensayos políticos y una de las figuas indiscutibles del actual panorama cultural francés.
De periodismo, literatura, política y de su última novela, nos habla Giesbert en la siguiente entrevista concedida a hoyesarte.com.

Para los que esteis dudosos respecto a esta novela, os dejo el enlace a sus primeras páginas.

Libros con alma y literatura culinaria

Muchas almas son las que se ha llevado el siglo XX y muchas las que rescata la literatura para nosostros. Con tanto acontecimiento histórico como telón de fondo de esta novela ha sido inevitable para mí retrotraerme a lecturas pasadas. Destaco estas dos para todos vosotros:

• "Pájaros sin alas", de Louis de Bernières. Magnífico retrato de la convivencia de cristianos, musulmanes y armenios en un pueblecito costero de la Anatolia de principios del siglo XX y del holocausto armenio
• "Velódromo de invierno", de Juana Salabert, sobre la redada del mismo nombre llevada a cabo sobre los judíos en Francia durante la Segunda Guerra Mundial

Asimismo no son pocas las novelas que a través del sabor de los platos en ellas elaborados pretenden apelar a nuestros sentidos, incluyendo incluso un recetario al final de las mismas. De estas 'novelas culinarias' citaré:

• la ya clásica "Como agua para chocolate", de Laura Esquivel
• y la más actual "La abuela Lola", de Cecilia Sanmartin

Y el próximo viernes... Volaremos de regreso a tierras britanas con Myrddion Merlinus. Lealtad y un juramento escribirán la historia del augur y su país en la última entrega de Profecía de Merlín. "Red de traiciones", de M. K. Hume.