( IV.7). SIMBOLOGÍA ZOOMÓRFICA.
Difícilmente reconocido y representado, este símbolo aparece, cuando menos, inexplicado. Tuve la suerte de acceder a su conocimiento y posterior estudio a través de comentarios, indicaciones y conversaciones con Laura Alberich - Baruk- quien, con su maestría, me abrió el camino y desbrozó dudas. Sea, pues, para ella mi dedicatoria y reconocimiento porque supo ver allí donde la mayoría de nosotros ni siquiera miramos.
Textos de las más diversas procedencias, desde la Naturalis historia en 37 libros de Galus Plinius Secundus (23 79 d.C.), pasando por el Fisiólogo griego (siglos III V d.C.), hasta los numerosos bestiarios medievales se refieren a la “mustela nivalis". Un extracto que considero ilustrativo sobre lo que durante casi dos milenios se pensaba sobre la comadreja sería el siguiente:
“La llaman comadreja (mustela) como si fuese un ratón alargado, pues los griegos usan “theon”para decir “largo”. Cuando vive en una casa, se mueve de un lugar a otro con sutil astucia, después de haber tenido a sus crías, y siempre descansa de noche en una madriguera diferente. Persigue a las serpientes y a los ratones. Existen dos clases. Una vive lejos, en el bosque los griegos llaman a éstas “Ictides” y la otra vagabundea por las casas. Algunos dicen que conciben por la oreja y paren por la boca, mientras, por otra parte, otros declaran que conciben por la boca y dan a luz por la oreja".
Se dice que las comadrejas son tan entendidas en medicina que, si por cualquier circunstancia sus crías mueren, pueden resucitarlas si consiguen llegar a tiempo.
"Estas criaturas representan a no pocos de vosotros, que aceptáis de buen grado por el oído la semilla de la palabra de Dios, pero que, entorpecidos por el amor de las cosas terrenas, la relegáis a un lugar inadecuado, y disimuláis lo que oís.” (Bestiario de Cambridge).
En los Bestiarios, basados en el Fisiólogo, los recopiladores comienzan a introducir moralejas cristianas de lo más variado.
“La “mustela” es un animal pequeño (y muy inteligente), que tiene una extraordinaria propiedad: concibe por la oreja y pare por la boca; da a luz a sus hijos muertos, y se dice que conoce una hierba que los hace resucitar. Esta “mustela” representa a los buenos predicadores, que predican la palabra de los Evangelios, de las Epístolas, y de las profecías, a los oídos de los hombres del mundo…”
Pero, muy tempranamente, comienza a identificarse a la comadreja con la Virgen María:
-“Dios hablaba a través del ángel, y la Virgen quedaba impregnada por el oído” (San Agustín s. IV).
-“Salve, Virgen madre de Cristo, / Que concebiste por el oído” (Santo Tomás Becket s. XII).
Y, así, llegamos a una representación iconográfica impactante –e inédita- que se encuentra pintada en la techumbre mudéjar de Santa María de Mediavilla (Teruel). En uno de los canes que sustenta el tirante con la epigrafía latina del Ave María: “Ave Maria gratia plena Dominus tecum bened(icta)” está representada una comadreja (la Virgen María) dando a luz por la boca a un león (Jesucristo).
Plutarco en la historia de Isis y Osiris nos indica que " la comadreja concibe por la oreja y pare por la boca". Nos impresiona que conciba por el oído pues esta metáfora está presente en la Madre María, y la encontramos asociado con un roedor, implacable a veces, otras, cuando se familiariza en una casa con sus habitantes, bastante confiada. La explicación la encontramos en L Charbonneau Lassay, tomo II de su Bestiario de Cristo, que lo asocia con la vieja tradición pagana del oficio de maestro y discípulo. Concebir por el oído es aceptar la semilla de la palabra, tal como sucedió con el Verbo Divino y luego, una vez que el discípulo es iniciado en los misterios y aprueba, está en condiciones, por la boca, de sembrar nuevamente esas semillas. Se le asociaron a la comadreja un gran celo y cuidado de sus crías, actitud que bien puede compartir el cristianismo con el cuidado de Jesús por sus creyentes. Pero otra de las particularidades de la comadreja es el de atacar otros roedores considerados impuros, como las ratas y ratones y también dicen que es una íntima enemiga de las víboras. Estas actividades la convierten en un aliado de combatir lo impuro, enemigos satánicos. Pero el mayor de todos sus portentos en derrotar al basilisco, monstruo mitológico descrito por los griegos como una gran serpiente con forma de ave, cuyo gran poder consistía en matar con la mirada. La comadreja seguía al basilisco hasta su guarida siguiendo el rastro del pasto quemado que dejaba el primero a su paso y allí lo encaraba matándolo con su simple olor y muriendo al mismo tiempo, acción no exenta de acreditarse como un verdadero sacrificio de la bella señorita comadreja. Aristóteles agrega que para esta operación de limpieza la comadreja masticaba ruda antes del combate: " La comadreja combate a las serpientes tras haber comido previamente ruda, cuyo olor les resulta insoportable", comenta el gran filósofo.
No es extraño que Aristóteles hiciera este comentario algo cómico hoy en día, pues la ruda estaba asociada a la curación de la sarna, la lepra y el herpes, enfermedades asociadas con lo impuro de manera tal que siendo la comadreja una consumidora de ruda, se asegurara ser un animalito, un ratón grande digamos, asociado con la purificación que beneficia a los humanos. El aspecto negativo de la comadreja viene a través del mito, cuando no de su actividad de asaltar gallineros. En el caso del mito, Galantis era una criada de Alcmena, embarazada de Hércules por Zeus a la que detestaba con toda su fuerza la diosa Hera, quien arrodillada frente a la parturienta, retrasaba el alumbramiento. Galantis distrajo a Hera de manera tal que Alcmena pudo parir a Hércules, pero la diosa la castigó convirtiéndola en comadreja. A su vez, el Pentateuco había clasificado a la comadreja en animal impuro. De lo hasta aquí expuesto, podemos concluir que pese a los elementos oscuros como el engaño y la lascivia, la comadreja ha sido asociada con buena fortuna en el bestiario cristiano como un animal purificador.
Sección para "Curiosón" del grupo "Salud y Románico".