“La Conciencia sin Fronteras”(No Boundary – 1979) es el segundo libro de Ken Wilber, y el que cierra lo que el denomina “Wilber 1″ o su pensamiento temprano y romántico. Mucho evolucionó desde entonces el pensamiento de Ken Wilber. Sin embargo, para muchos críticos, esta etapa se centra en lo mas interesante de su obra y en lo que mas ha trascendido.
Wilber argumenta (muy bien, por cierto) las causas de esta división, y va introduciéndose cada vez en terrenos mas profundos de la realidad.
Para Wilber, el proceso de unificación se ciñe a un espectro que él denomina “el espectro de la conciencia”, el cual se completa por pasos. Para cada nivel o patología personal, hay unas terapias que se adecuan a ese estado.
En el primer paso nos encontramos ante el nivel de la persona. Este nivel, en el que nos encontramos la mayoría de seres humanos, evidencia nuestra fragmentación entre el ideal y lo oculto, la imagen social y la verdad personal, entre la máscara y la sombra. Para el autor, debemos integrar el inconsciente reprimido para tener un ego sano. El Psicoanálisis o el Análisis Transaccional, así como la terapia Gestalt, son los enfoques adecuados para este nivel.
El siguiente nivel es el centáurico. Ya tenemos un ego sano, pero disociado del cuerpo. Este es el nivel existencial en el que tenemos que ser seres humanos completos. Para Wilber, la terapia Gestalt o la Bioenergética son las terapias adecuadas en este nivel.
En el siguiente paso nos comenzamos a adentrar en las bandas transpersonales. Es el terreno de los arquetipos y el inconsciente colectivo. Los mitos como guías de nuestra vida a través de los sueños, el arte, etc. Comenzamos a tener intuiciones que trascienden lo personal. La Psicología Junguiana o la Psicosíntesis son enfoques típicos del nivel transpersonal.
Por ultimo, el no-nivel, es el absoluto, el de la conciencia en si, que suele darse cuando los anteriores han sido correctamente integrados. Este enfoque no tiene técnicas en si, aunque la meditación es lo habitual para dar el salto, así como las ciencias místicas como el Vedanta Advaita, el Zen o el Taoísmo.
Este libro es una delicia, muy bien escrito y ameno. Es ligero y en ningún momento se hace denso o complicado. Nos puede ayudar a tener comprensiones mas profundas y a estructurar una practica cabal en base a nuestros objetivos vitales. Muy recomendable.