La Navidad de 1969 fue especialmente festiva en Noruega: en diciembre se había confirmado que Ekofisk, un yacimiento de petróleo en el mar del Norte, era apto para extracciones petrolíferas. El país pasaría de ser apenas industrializado a un actor en el panorama internacional. Los noruegos relatan con orgullo la historia de cómo entonces decidieron tardar un poco más y formar a sus propios expertos e ingenieros para poder nacionalizar todo el beneficio.
A medida que Noruega entrelazó su futuro al éxito de las extracciones, se hizo cada vez más evidente que el petróleo le permitiría convertirse en lo que es hoy: uno de los países con mayor riqueza per cápita del mundo. El beneficio le permitió desarrollar su tejido industrial, en parte ligado a las necesidades derivadas del crudo, como la industria naviera o la de maquinarias. En la actualidad la extracción de petróleo representa un 14% del PIB noruego y supone un 45% de sus exportaciones. Además, es el tercer exportador mundial de gas y ocupa el duodécimo puesto en exportaciones de petróleo.
Sin embargo, allí se encuentra la gran contradicción noruega: el país alimenta el mayor fondo soberano del mundo con el beneficio que r...
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Nombre de usuario Contraseña Recordar cuenta Recordar contraseñaLa contradicción noruega: financiar la transición verde exportando petróleo fue publicado en El Orden Mundial - EOM.