La Copa de la Liga española

José Luis Núñez alcanzó la presidencia del F.C. Barcelona en el año 1978 y poco tiempo después fue el impulsor de una nueva competición en el calendario español, la Copa de la Liga. Su intención mediante esta propuesta era conseguir más dinero por los derechos televisivos de los partidos y un mayor número de ingresos por la venta de entradas.

El pistoletazo de salida tuvo lugar en 1983 cuando dio comienzo la primera edición. El formato del torneo era mediante eliminatorias y la final se disputaba a doble encuentro. Se crearon competiciones para Primera División, Segunda, Segunda B y Tercera, en la categoría reina, además, se daba la oportunidad de participar a un equipo de Segunda, dos de Segunda B y otro de Tercera. Normalmente se situó en el calendario entre abril y junio y como premio se instauró una plaza para la Copa de la UEFA a partir del año 1984.

El primer ganador fue el F.C. Barcelona que derrotó en la final a su gran rival, el Real Madrid. Los blaugranas eliminaron previamente al Sporting en tercera ronda y al Atlético de Madrid en semifinales tras remontar el 1-0 del Vicente Calderón. La ida ante los blancos se saldó con un empate a dos (uno de ellos muy célebre de Maradona tras sentar a Juan José) en el Bernabéu que allanó el camino hacía el título en Barcelona, donde se impusieron por 2-1 con otra diana del astro argentino.

De esta forma los culés terminaron una temporada convulsa con dos títulos, después de haber logrado también la Copa del Rey frente al Real Madrid en La Romareda. Por entonces ya se había hecho cargo del equipo el argentino Menotti, que había reemplazado al alemán Lattek tras su destitución. En la plantilla barcelonista brillaban entre otros Schuster, Urruti, Carrasco, Víctor Muñoz y por supuesto Maradona.

La segunda edición tuvo como triunfador a un sorprendente Real Valladolid. Los pucelanos hasta entonces habían llegado a una final de Copa en 1950 y como victorias más relevantes en su historial figuraban los Campeonatos de Segunda División en 1948 y 1959 y la Copa RFEF del año 1953.

El cuadro blanquivioleta ocupó los últimos puestos en la competición doméstica aunque acabó por salvarse del descenso después de un buen final de campaña. Esa racha se trasladó a la Copa de la Liga donde fueron eliminando consecutivamente a Zaragoza, Sevilla por penaltis y Real Betis con un triunfo fantástico en Zorrilla por 3-0. En la final se vieron las caras con el Atlético de Madrid, al que sacaron un empate a cero en el coliseo rojiblanco para doblegarle cuatro días después en casa por 3-0. Los héroes fueron Minguela y Fortes que salieron desde el banquillo para batir al arquero Carlos Pereira.

En 1985 el Real Madrid inscribió su nombre en la lista de ganadores de la Copa de la Liga. Los blancos completaron un curso muy irregular en la Liga pero se repusieron alzando primero la Copa de la UEFA y luego la Copa de la Liga. En este torneo se tomaron la revancha contra el F.C. Barcelona de dos años antes y apearon a los catalanes en cuartos desde el punto de penalti. A continuación el Sporting estuvo cerca de dejarles fuera de la final al ganar por 3-1 en el Molinón, pero en la vuelta dos dianas de Santillana y una de Pineda culminaron la remontada.

En la final se vivió un apasionante derbi con el Atlético de Madrid de Luis Aragonés. Los colchoneros se hicieron fuertes en su feudo y viajaron a Chamartín con una ventaja de 3-2. Sin embargo en el Bernabéu y apoyados por su afición el Real Madrid conquistó el trofeo al imponerse por 2-0. El primer gol aquella noche lo logró el alemán Stielike en el que fue su último partido con la camiseta blanca, pese a los gritos de los aficionados pidiendo que se quedase.

La última edición se disputó en 1986 en la que el F.C. Barcelona repitió la victoria de 1983. El cuadro entrenado por Terry Venables venía de dos palos durísimos al caer en la final de Copa ante el Zaragoza y sobre todo de perder la final de la Copa de Europa en los penaltis contra el Steaua de Bucarest. Pero en el torneo nacional sacaron su carácter y se plantaron en la final tras deshacerse del Real Madrid con un 0-4 incluido en el Santiago Bernabéu, Sporting de Gijón y Atlético de Madrid.

Su rival por el título fue el Real Betis que no lo puso nada sencillo. En la ida en el Benito Villamarín un tanto del argentino Calderón permitió a los verdiblancos llegar con ventaja a la Ciudad Condal. Sin embargo en Barcelona y aunque solo acudieron 20.000 personas, los pupilos de Venables dieron la vuelta al global de la eliminatoria gracias a los goles de Amarilla y el zaguero Alexanco.

Escasas fechas más tarde la Copa de la Liga desapareció por la poca rentabilidad que supuso para los clubes, la dificultad para encontrar fechas en el calendario y el nulo éxito en las taquillas y la televisión. Para la historia queda Hugo Sánchez como máximo realizador de la competición con 14 goles, todos en su etapa en el Atlético de Madrid. Le siguieron el paraguayo Amarilla que consiguió el récord de más dianas en un torneo con 7 y el vitoriano Uralde, único futbolista que anotó al menos un tanto en cada edición.