La corrupción del fútbol español no tiene límites

¿En qué país hemos estado viviendo hasta ahora? Seguimos sacando mierda de nuestro fútbol (la mejor liga del mundo, decíamos), así como de nuestro deporte en general y por supuesto de la política.

Hemos estado viviendo en un mundo de corrupción perfumado con rosas por encima. Llevamos años mofándonos de otros países cuyos amaños se han descubierto antes que en el nuestro. Y el resultado es que prácticamente cualquier país era más honrado y desarrollado que España.

No nos puede sorprender a estas alturas la corrupción del fútbol y mucho menos la de Jesús Gil, famoso por haber sido denunciado por todo tipo de ilegalidades. Pero desde luego todo lo que está surgiendo en España, en la política, el fútbol, el dopaje, así como accidentes de trenes, metros, masificaciones en fiestas que costaron muertes, hacen pensar que nuestra nación es un país tercermundista con una capa de barniz por encima y con una población ciega que no ha querido enterarse de nada, donde muchos criticaban sin sonrojarse la pesadilla que vivía la población griega.

Ahora, Paulo Futre ha desvelado en el diario Record el “supuesto” amaño del Espanyol-Atlético de la temporada 90-91. El Atlético era matemáticamente segundo mientras que el Espanyol necesitaba ganar en la última jornada para evitar jugar la promoción de permanencia.

“Cuando estábamos en el hotel, en Barcelona, el presidente Jesús Gil y Gil viene hacia mí y me dice: No podemos ganar hoy. Dile a tus compañeros que no corran. Fue la única vez que algo así me pasó”, asegura Futre en el diario Record aunque esto no es de extrañar, si realmente le dio boleto, claro.

Jesús Gil explicó a Futre que había llegado a un acuerdo con Julio Pardo Padrós, por aquel entonces presidente del Espanyol, para amañar el resultado del partido y para el traspaso de un jugador entre ambas entidades. Curiosamente volvemos a hablar de 2 entidades que presumen de ser muy patriotas y que representan con orgullo a España, a esa España que tiene la corrupción por bandera.

Futre se negó y de hecho ni siquiera estuvo en el banquillo en aquel partido.”Así no quiero jugar, vas tú y se lo dices”, asegura que le respondió Futre a Jesús Gil.”

Así que, antes del pitido inicial, Gil entró en el vestuario y le dijo al equipo que no podía ganar. “Mis compañeros no se atrevieron a criticarle. Él era quien nos pagaba los salarios y amenazó a todos con despedirlos si no estaban de acuerdo“.

El Atlético perdió 3-1 ante el Espanyol, por lo que los blanquiazules se mantuvieron en Primera en detrimento del Zaragoza, pues mandaron a los maños a jugar la promoción de permanencia ante el Murcia.

Esto solo es un capítulo más de la realidad que se vive en nuestro decrépito sistema institucional, plagado de corrupción, que afecta a todos los rincones de España, a la espera de un nuevo escándalo que por desgracia, ya no escandaliza a nadie.