Hoy hemos tenido la oportunidad de disfrutar con la docencia de María Batet. Seguro que este resumen no hace honor a todo lo que nos ha enseñando, pero valga mi intención de reflejar sus enseñanzas como excusa de mi torpeza.
María ha iniciado su sesión enumerando los tres ejes fundamentales de cualquier emprendimiento: Creatividad, comunicación y actitud.
Partiendo de que la creatividad nos ayuda a ser recordados, a diferenciarnos de los demás, a impactar; debemos utilizar técnicas que nos ayuden a aflorar esta cualidad humana. Seguidamente, María nos ha propuesto los Mapas Mentales. ¿Por qué? porque se asemejan a la forma en la que nuestro cerebro expresa las ideas, las genera, las interconecta. Se trata de una generación orgánica, global, desordenada pero no caótica.
La creatividad es como el buen vino, necesita tiempo, aderezos, pasión, emoción... No ocurre nada si no has pensado, si no eres curioso, si no lees, no te informas... La visualización te permite soñar con el futuro, ergo lo ves y lo puedes crear.
¿Es suficiente soñar, pensar, leer, curiosear...? No, debes tener actitud. La actitud es la chispa que enciende nuestra moto, con la que saldremos de la autopista para recorrer los caminos de la creatividad.
Emprender es descubrir mil escenarios en cada cosa, en cada concepto.
Según El libro negro del emprendedor, de Fernando Trias de Bes, para emprender la idea no es necesariamente lo único importante, el autor nos dice:
Es mejor una idea mediocre brillantemente implementada que una idea brillante mediocremente implementada.
Proceso de creación:
Para finalizar, el azar juega un papel importante en la creación. Introduce, cuando creas, elementos aleatorios, por lo que te verás obligad@ a aguzar el ingenio.
¿Quieres ver el mapa mental?
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