Como saben, me gusta mucho probar productos nuevos, tanto de dermocosmética, maquillaje, fragancias, como (obviamente) de ropa. Y si algo me gusta y/o me funciona me gusta compartirlo porque muchas me preguntáis. Como anécdota, les puedo contar que hace varias semanas, viendo un programa de televisión sobre productos exclusivos de todo tipo, aparecía esta crema y aunque Arturo y yo nos quedamos alucinando con la piel de la señora que decía usarla, yo misma le dije "como puede valer tanto una crema?" Y él (sabiamente) me dijo "algo debe tener, sino no lo valdría". Pues no se equivocaba el Arturín!
Les voy a resumir muy brevemente como surge esta crema y el por qué de su valor. Hace medio siglo, el físico aeroespacial Max Huber sufrió un accidente en su laboratorio que le causó severas quemaduras y el rostro se le quedó desfigurado. Intentó muchas cosas pero no le funcionó nada, y decidió ayudarse a sí mismo, así que comenzó a investigar y después de 12 años y 6.000 experimentos consiguió crear La Crème de la Mer. Surgió a raíz de observar a los pescadores, porque vio que a pesar de trabajar en un medio tan hostil como el mar (sol, salitre, mar, redes, etc) tenían las manos súper bonitas y suaves, y poco a poco, investigando, se dio cuenta que las algas con las que trabajaban podían ser las causantes de eso. Efectivamente, no se equivocaba y lo que hizo fue biofermentar las algas, y a través de un proceso algo complejo (del que ya les hablaré), consiguió crear esta fórmula que en él dio muy buenos resultados mejorándole muchísimo el aspecto de su cara. El proceso de biofermentación es tan preciso que cada partida tarda de 3-4 meses en fabricarse, y para mantener inalterable su formulación los tarros se rellenan aún a mano.
Necesitaría mucha paciencia por parte de ustedes para que conozcan como se consigue hacer hoy en día esta crema respetando en todo momento el proceso original de Huber. Intentaré grabar un video cuando haya probado la crema y ahí os contaré más, porque de verdad se los digo, vale la pena saberlo, que el saber no ocupa lugar ;)
Fíjense si se respeta tanto la fórmula y el procedimiento original para seguir creándola, que durante la presentación pregunté si las cremas tenían factor de protección, y la respuesta fue que no, porque cuando la hija de Huber acordó vender la fórmula, dijo que tenía que seguir siendo siempre (siempre) igual, así que los laboratorios lo han respetado a raja tabla. Tienen una línea solar a parte, pero la Crème de la Mer, la primera, la original, la "milagrosa" como la llaman, es esta que veis aquí. Como algunas son muy curiosas pero no se atreven preguntar precios, y al final es un factor determinante a la hora de comprar o no, les voy a chivar que el bote de 30 ml tiene un precio de 142€.
Después de la presentación estuve diciéndole a mi marido "prepárate, que ya sé lo que le pido a los Reyes Magos" jajaja. Disfrutamos de un picoteo a la salida y pude hablar con algunas mujeres que usaban la crema y que estaban encantadas con los resultados, no será para menos! Dicen que quienes la prueban no la dejan, así que tengo miedo! Bueno, Arturo tiene más miedo jajaja!
Justo donde estábamos era en la planta baja de la Perfumería Dalia. Esta planta la abrieron hace dos semanas y está genial, porque han abierto también dos cabinas para realizar tratamientos de belleza, y están totalmente equipadas.
El único punto de venta en Tenerife en el que pueden encontrar esta crema es allí, en Dalia Perfumeria (Calle Castillo, 16) y las chicas las van a entender estupendamente, son muy amables! ¿Alguna conocía o conoce esta crema? ¿La han probado alguna vez? Un besote y feliz lunes!
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