Era lógico que llegase, pero no me imaginaba que iba a ser por causa de una pandemia como es la del coronavirus de Wuhan.
Las bolsas se hunden irremisiblemente como consecuencia de la incertidumbre y de las previsiones de caída del PIB mundial y en consecuencia de los resultados de las empresas cotizadas.
Hasta que no se estabilice la evolución del virus, no podremos hacer una estimación de la magnitud del impacto.
Confiemos que sea una cuestión de meses. China ya se ha atrevido a afirmar que en abril tendrá controlada la pandemia. Y esperamos que los avances en el tratamiento se vayan materializando.
En ese contexto me imagino que las compañías de salud, farmacia y biotecnología serán de las menos afectadas, y las relacionadas con el turismo y la movilidad, las que más.