En conclusión, que los pepinos españoles no son los causantes del tremendo brote de afectados que está recorriendo Alemania y que todavía se desconoce cuál es el alimento causante de la infección
El contagio de esta bacteria en el hombre suele deberse al consumo de alimentos contaminados, tales como carne picada cruda o poco cocinada o leche sin hervir,frutas o verduras, agua contaminada, que ha estado en contacto directo con heces de animales (el ganado bovino suele ser el principal reservorio) o con personas infectadas.En definitiva, el brote surge por una contaminación cruzada: alguien infectado manipula las verduras, se contaminan y al consumirse fresca se produce la infección. También puede deberse a que el agua esté contaminada o al contacto de los vegetales con heces contaminadas (el bovino suele ser el principal reservorio, hecho por el cual éste tipo de brotes tiene una elevada prevalencia en las hamburguesas)
¿Cómo podemos prevenir este tipo de infecciones?
- Cocinar adecuadamente la carne (más de 70ºC en el interior) pues la bacteria no resiste a altas temperaturas.
- No mezclar carne cruda con verduras listas para el consumo (ensalada, tomate, etc) y utilizar utensilios diferentes para la preparación de estos alimentos, es decir, si corto los tomates con un cuchillo no utilizar ese mismo para cortar la carne o viceversa)
- Utilizar agua potable para el consumo y para la limpieza de las verduras
- La leche o zumos consumidos deben estar pasteurizados.
- Las personas infectadas deben lavarse bien y con frecuencia las manos para evitar que la infección se propague
- Lavarse las manos tras ir al baño, estar en contacto con animales o cambiar pañales.
- Las personas que padezcan diarrea no deben nadar en piscinas públicas, ríos, lagos, bañarse con otros ni preparar comidas
- Pelar la fruta y la verdura correctamente antes de su consumo.
- Lavar con agua caliente y jabón las superficies que hemos usado en la cocina
- No volver a usar el plato en el que ha estado la carne cruda hasta que no se lave
- Sumergir las verduras durante 10 minutos en agua con unas gotas de lejía apta para el consumo humano o en un preparado para el lavado de hortalizaso cocer las verduras al menos 10 minutos o congelarlas antes de consumir