A pesar de los signos de debilitamiento del crecimiento económico a nivel mundial, los mercados regionales de diésel están ajustados y podrían ajustarse aún más cuando llegue el invierno y cuando Europa prohíba las importaciones de crudo y combustibles rusos. Los inventarios de combustible destilado son bajos en los Estados Unidos y Europa. Las reservas en los EE. UU. no han aumentado este verano como de costumbre, y en un mes desde finales de junio, han visto la mayor reducción para esta época del año en al menos 32 años. El mercado de combustibles en Europa está aún más ajustado, ya que las industrias y las empresas de servicios públicos buscan cambiar el gas natural por productos derivados del petróleo, cuyos precios están en niveles récord después de que Rusia redujo drásticamente las entregas a la UE y demostró que no podía ser considerado un proveedor de energía confiable.
En los próximos meses, la escasez podría empeorar aún más cuando comience la temporada de calefacción, que coincidirá con la prohibición prevista por la UE de las importaciones de combustibles rusos transportados por mar a principios de 2023.
EE. UU. exporta volúmenes crecientes de diésel a Europa, pero es poco probable que aumente los flujos mucho más porque los inventarios estadounidenses también están muy por debajo d e los promedios estacionales, mientras que las refinerías ya operan cerca de los niveles de capacidad.
Los inventarios de combustible destilado en Estados Unidos cayeron en 2,4 millones de barriles en la semana al 29 de julio y están un 25% por debajo del promedio de cinco años para esta época del año, mostró esta semana el último informe de inventario semanal de la EIA.
Con 109,3 millones de barriles al 29 de julio, las reservas de diésel, combustible para calefacción y otros combustibles destilados se encuentran actualmente en su nivel más bajo para esta época del año desde 1996, según estimaciones del analista de mercado de Reuters, John Kemp .
Por lo general, los inventarios de combustible destilado de EE. UU. aumentan durante la temporada de verano cuando las refinerías procesan el crudo en más gasolina para satisfacer la demanda de la temporada de conducción de verano. Pero este no ha sido el caso este año. De hecho, las existencias de destilados cayeron en julio hasta en 3 millones de barriles, que es la mayor caída estacional desde al menos 1990, señala Kemp.
En Europa, el inminente embargo de la UE sobre el crudo y los productos rusos está impulsando a los comerciantes a obtener cantidades cada vez mayores de diésel de fuentes no rusas. Estados Unidos ha sido una de esas fuentes y sus exportaciones alcanzaron los 1,4 millones de bpd en julio, el nivel más alto en cinco años . Gran parte del aumento proviene de Europa.
Europa en sí misma no ha logrado un avance significativo en la reducción de sus importaciones de diésel de Rusia; de hecho, aumentó las importaciones de diésel ruso en julio, según mostraron esta semana los datos de la firma de análisis de energía Vortexa .
Las importaciones europeas de diésel desde Rusia aumentaron a un nivel inusualmente alto de 680.000 bpd en julio, un 13% más mes a mes y un 22% año tras año, y superando los suministros no rusos en unos 200.000 bpd, según datos de Vortexa.
"En general, parece cuestionable si los europeos lograrán llevar a cabo la prohibición de importación de diésel anunciada, dados los precios récord del diésel en los últimos cinco meses, la creciente dependencia de Europa del diésel ruso, las limitaciones dentro del sistema global de refinación y la probable papel significativo del diesel como combustible de reemplazo para el gas natural y los déficits de energía. Lo anterior pondrá a prueba la resolución de Europa y sus políticos en particular", escribió el economista jefe de Vortexa, David Wech.
En el futuro, será crucial ver si las refinerías estadounidenses, atraídas por los altos márgenes europeos, producirán más diésel para exportar a Europa, dijo Wech al Financial Times .
Según las refinerías de EE. UU., no hay mucho margen para un mayor aumento de los envíos de diésel de Estados Unidos a Europa.
Gary Simmons, vicepresidente ejecutivo y director comercial de Valero Energy, dijo la semana pasada en la llamada de ganancias del segundo trimestre que "va a ser un verdadero desafío para nosotros poder suministrar mucho más diésel a Europa".
Con los inventarios de EE. UU. bajos y "la industria básicamente se está agotando", "es muy difícil para mí ver que habrá mucho flujo de EE. UU. hacia Europa", agregó Simmons.
El suministro de combustible en toda Europa se ve aún más interrumpido por los niveles de agua críticamente bajos en el río Rin, un importante corredor de transporte de productos derivados del petróleo. La unidad alemana de OMV le dijo a Bloomberg que "está observando una corrida actual de combustible para calefacción y diésel".
Incluso a medida que las economías se ralentizan, es probable que el cambio de combustible del gas al petróleo en Europa a medida que nos acercamos a la temporada de calefacción invernal respalde la demanda de combustible destilado y potencialmente ajuste aún más el mercado del diésel.
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