¡Vaya pedo que nos vamos a agarrar! ¡Dani, trae la farla!
Mira, colega, ¡¿has oído hablar alguna vez de Vietnam?! ¡Yo no vi morir a mis colegas con la cara en el barro para esto! ¡Tres horas! ¡Tres malditas horas y media de chistes malos, números musicales cutres, discursos interminables, el horrendo experimento de Álex O'Dogherty con su teclado del infierno y las rumbas del Chiquetete ése! Vamos, que en lugar de una ceremonia de entrega de los Goya 2015, parecía una gala de José Luis Moreno y eso que el espectáculo tampoco empezó del todo mal, a pesar de lo light del monólogo inicial, al que, como de costumbre, le faltó mala leche (¿dónde está nuestro Ricky Gervais patrio?), pero bueno, Dani Rovira estuvo bastante simpatiquillo -además de que es todo un imán para el gran público, aún estudian por qué- como conductor de una 29ª Edición que fue decayendo conforme el tiempo avanzaba. Ya es tradición.Sigue, tras el salto.
Al margen del flojillo resultado del show como programa de entretenimiento, al menos los premios estuvieron bien repartidos, con una La Isla Mínima que lo merecía todo y, efectivamente, se lo llevó todo. Diez galardones de los 17 a los que estaba nominada la película de Alberto Rodríguez (quien lució en el photocall el temido lazo naranja en defensa de los trabajadores de RTVE), incluyendo los más gordos: Mejor Película, Mejor Director, Mejor Guión Original y Mejor Actor, que recogió un Javier Gutiérrez para el que no ha habido más que halagos por su rol en la cinta del sevillano y no es para menos. Además, el thriller policíaco se llevó también los premios a Mejor Fotografía y Mejor Banda Sonora, que tampoco nos cogieron por sorpresa.
El que no se fue tan contento fue Carlos Vermut, cuyo film fue el gran perjudicado de la noche y es que su mayor rival le arrebató todo lo que pudo, excepto el reconocimiento a esa maravilla que es Bárbara Lennie como Mejor Actriz Protagonista, también muy bien ganado. Magical Girl, premiada en San Sebastián con la Concha de Plata, no pudo optar a nada más y quizás no hubiera estado mal honrarle al menos con el premio al Mejor Guión, porque el segundo largometraje del madrileño también es una de las joyitas de esta temporada sin desperdicio, la verdad, especialmente al incluir a un José Sacristán que se sale en su rol y que tampoco se alzó con el cabezón, que fue a parar a las manos de Karra Elejalde por su papel cómico en Ocho Apelllidos Vascos y, de acuerdo, teniendo en cuenta que es lo mejor de la película, tampoco chirría, pero es que Sacristán... ¡Joder, qué grande es Sacristán!. Tenemos nuestras dudas, pero eso sí, Karra nos ganó definitivamente al nombrar a nuestro querido y tristemente fallecido Álex Angulo en su discurso.
¡Aquí mi Goya y aquí mi... !
Su compañera de reparto en la película de Emilio Martínez-Lázaro, Carmen Machi, también pudo decorar su estantería con el cabezón al recibir el premio a la Mejor Actriz de RepartoNos convenció algo menos el galardón de Mejor Actor Revelación concedido a Rovira por hacer de... ¿Dani Rovira? Y bueno, el tipo es majete y eso, pero vamos, como intérprete tampoco es que sea un portento, ¿o sí? Una emocionada Clara Lago, al menos, sí lo tenía claro, pero ella se lo tira y nosotros no, así que tampoco es objetiva. Y es que no se esperaba ni él salir elegido frente a un rival tan duro de roer como era el guapete protagonista de moda de El Niño, Jesús Castro, pero en el cine como en el amor, no basta con ser un niño mono, más vale hacer reir, aunque sea con chistes de tetas y pedos.
Otra a la que le pilló de sorpresa salir victoriosa fue la gallega Nerea Barros, quien se hizo con el galardón a la Mejor Actriz Revelación por su trabajo en La Isla Mínima, un reconocimiento que nos dejó bastante más satisfechos que el de su homólogo en el apartado masculino, pero bueno, está claro que contentar a todos es imposible y por eso tampoco nos gustó demasiado que no se concediera el galardón a Mejor Director Novel a ese par de descubrimientos que han sido Juanfer Andrés y Esteban Roel por su enorme labor en Musarañas, y en lugar de ellos, fue Carlos Marques-Marcet el beneficiado por 10.000 Km.
¡JOLÍN¡ ¡Y ahora dónde coño meto yo este pedrusco!
También hubo Goyas para Mortadelo y Filemón contra Jimmy el Cachondo, que se llevó los de Mejor Película de Animación y Mejor Guión Adaptado, un premio que significa que el género comienza a tomarse tan en serio como las cintas de acción real y eso nos gusta, nos gusta muchísimo.Otras galardonadas de la noche fueron la desternillante Relatos Salvajes (Premio a la Mejor Película Iberoamericana), la entrañable y maravillosa Paco de Lucía: La Búsqueda (Mejor Película Documental) o la polaca Ida (Mejor Película Europea y, ojo, esto es un síntoma más de que tiene todas las de ganar en los próximos Oscars), pero bueno, que todo esto ya lo tenéis en la lista de ganadores que publicamos nada más finalizar la gala, así que prefiero no enrollarme más con el palmarés, que parezco Antonio Banderas en su interminable discurso de ayer tras recibir el Goya de Honor, aunque eso sí, las sinceras palabras que dedicó a su hija nos hicieron moquear a más de uno. Si es que en el fondo somos unos putos sentimentales.
Y las lágrimas continuaron, pero no por la emoción, sino por la pena que dio el numerito de Álex O'Dogherty, con el que nos sangraron los ojos, los oídos y hasta el maldito alma y a ello se unieron los temas rumberos que se cantó el moreno ese de la barba cuyo nombre no me he molestado ni en buscar en el Google, porque no me importa un carajo y quiero olvidarlo pronto.
El que no se olvida del IVA un año más fue Enrique González-Macho. El presidente de la Academia de Cine Español criticó nuevamente el alto impuesto que se aplica a la cultura y volvió a pedir al Gobierno que lo baje de una
El buenrollo reinaba en el ambiente
Ciertamente, atrás esperamos que se queden O'Dogherty y el Chiquetete, así como ese maldito 21% de IVA que nos aplican sin vaselina y que duele, duele mucho, pero si el 2015 se presenta tan bueno o mejor que el pasado año para nuestro CINE, qué duda cabe de que resistiremos, eso sí, lo que no aguantaremos tan bien son otras tres horas y media de horror en la próxima edición.Nuestra más sincera enhorabuena a los vencedores y un saludo, Antonio, que seguro que nos estás leyendo.