La cura del bienestar, Atrapado en una realidad siniestra

Por Alvaro López
El próximo 24 de marzo llega a nuestras pantallas La Cura del Bienestar, lo nuevo de Gore Verbinski (The Ring, Piratas del caribe, El Llanero solitario) con un guión de Justin Haythe y está protagonizada por Dane DeHaan, Mia Goth y Jason Isaacs.

"La cura del bienestar" cuenta la historia de Lockhart (Dane DeHaan) un joven y ambicioso ejecutivo que se ve obligado a viajar a un remoto lugar en los Alpes suizos. Su misión es traer de vuelta al director de su compañía, que se encuentra en el Volmer Institute, un centro de bienestar. Pero este centro terapéutico, que a primera vista parece idílico, resulta muy misterioso y guarda un tétrico secreto que impedirá que Lockhart salga de ahí fácilmente.

La cura del bienestar no es lo que esperas

Las sospechas del joven pronto le harán descubrir que los milagrosos tratamientos del spa no son lo que parecen. Y es que, los propósitos del Dr. Volmer (Jason Isaacs), director de esta clínica, son mucho más siniestros que el simple servicio de las necesidades y atenciones de sus pacientes. La cordura del joven se pondrá a prueba cuando empiece a desvelar los terroríficos secretos que allí se ocultan y sea diagnosticado con la misma extraña enfermedad que mantiene a los pacientes a la espera de una cura.

Gore Verbinski ha querido hacer una película muy personal y querer regalarnos a los fans del terror clásico un producto diferencial entre los típicos donde se presentan cintas basadas en los jump scares gratuitos (sustos facilones) que son la esencia de la mayoría de filmes de este género. Pero ha ido mas allá ofreciéndonos algo mas cercano a lo que nos dejó Scorsese con "Shutter Island" hace unos años. Pues esta cinta es una mezcla entre varios productos como "El resplandor", "Shutter island" e incluso videojuegos como Bioshock y Outlast de donde toma mucha inspiración para crear su propia narrativa. Nos deja unos planos visualmente muy bellos ya que aprovecha el lugar, un hospital mental en una montaña frondosa como escenario propicio para estos juegos mentales.

El tono general, unos colores grises, apagados y cargados de misterio acompañan a la perfección a la historia que quiere contar con tintes de terror y thriller a partes iguales con un leve toque de fantasía, sirven de perfecto trasfondo para una historia perturbadora. El problema es que quiere abarcar tanto en tanto tiempo que le pesa a la película y la arrastra a ciertos momentos de incredulidad, esto te puede sacar de la película, siendo posiblemente el mayor error de la película. Pero en términos generales avanza cautelosamente y a pinceladas dejándote leves pistas para que sea el propio espectador el que se monte sus teorías mentales, para acabar con un clímax totalmente alocado, revelador y hasta extraño.

El trío protagonista liderado por Dane funciona a las mil maravillas y una estupenda Mia Goth con unas secuencias de desnudo un tanto peculiares y como siempre, un acertado Jason Isaacs proponiéndonos un papel de lo mas interesante de la cinta. Precisamente lo que hace que esta película te mantenga enganchado es su historia, aparentemente resulta simplona pero se va desarrollando de una manera casi atroz acompañada de unas secuencias muy vistosas, un desarrollo alocado, unos tiros de cámara casi imposibles en las secuencias de, digamos, de máxima tensión.

El propio hospital mental se podría considerar un personaje en sí. Sus pasillos, su gente, lo que le rodea, las habitaciones, sus secretos… Quien haya jugado al videojuego Outlast verá reflejados muchos aspectos y detalles del mismo, todo con un estilo muy cercano al gótico. Es una película que merece la pena ir a ver por sus secuencias retorcidas y macabras acompañadas de una historia gótica-fantástica realmente bien narrada, la cual como con su protagonista, jugará con nosotros a medida que avanza la película.

En resumen, la película con una premisa un tanto simplona resulta ser una delicia visual y argumental que brilla en muchos aspectos. Rezuma a toques y estilos tan parecidos a "El Resplandor" o "Shutter island" en el buen sentido que hacen que la historia nos atrape. Encontraremos detalles tan icónicos del cine de terror clásico bien expuestos, ambientados en una época actual, los cuales los fans más puristas agradecerán en sus 147 minutos de duración, aunque eso puede esta duración pese a alguien, se trata de una historia perturbadora muy recomendable.