La decoración de las habitaciones de los niños.

Decorar las habitaciones de los niños puede convertirse en todo un desafío; porque se combinan diferentes variables que deben ser tenidas en cuenta.

La edad de los niños de la familia es el primer factor a tener en cuenta, y que los niños crecen también; porque sus gustos irán cambiando.

En consecuencia, al momento de enfrentar la decoración de las habitaciones de los niños deben tenerse en cuenta dos conceptos fundamentales: la flexibilidad y el cambio.

- Los colores de las habitaciones de los niños.

Es muy difícil establecer un patrón de colores para el dormitorio de un recién nacido, el cual crecerá rápidamente y comenzará a definir sus gustos particulares. Es importante considerar el crecimiento de los niños, y sobre todo que dependiendo de las fases de su desarrollo sus gustos se irán modificando.

Los dormitorios de las niñas y de los varones suelen diferenciarse desde su nacimiento, tanto en los colores de las paredes de sus habitaciones como en la decoración en general de sus dormitorios.

Por eso hay que pensar en el uso de colores que se pueden combinar de nuevas maneras, para mantener la habitación adecuada para la edad a medida que los niños crecen.

A veces, evitar el tradicional rosa y azul claro puede dar un poco más de longevidad a la pintura de las paredes de las habitaciones infantiles; y como siempre, los colores neutros suelen resultar más perdurables a los gustos particulares.

- Los muebles de las habitaciones de los niños.

Para muchas personas los muebles son casi un compromiso con la decoración de moda; sin embargo, para los niños no existen tales condicionamientos. Para lograr dormitorios infantiles flexibles, no conviene llenar la habitación con muebles y decoraciones demasiado pueriles.

Los muebles de los dormitorios de los niños deben crecer al igual que ellos. Las camas deberán ser más largas, los asientos más altos, y todos los muebles en general se deben ir adaptando al crecimiento del niño.

Una cama con forma de coche de carreras para los varones, o una cama de cuento de hadas estilo princesa para las niñas pueden funcionar a corto y mediano plazo. Sin embargo, en poco tiempo los niños pueden argumentar el aburrimiento, o la necesidad de un cambio de estilo en la decoración de sus dormitorios; y las camas tan originales quedan fuera de la ecuación.

Conviene invertir en camas que funcionalmente se adapten al crecimiento de los niños, las cuales incluso pueden servir hasta en su adolescencia. Desde luego, por un tema de salud, los colchones conviene que sean ergonómicos y de buena calidad.

Entre los muebles de las habitaciones de los niños, las camas suelen ser los elementos más importantes; y no conviene ahorrar a corto plazo para terminar gastando el doble en poco tiempo.

- Los niños necesitan armarios en sus habitaciones.

Todos los miembros de la familia necesitan armarios para guardar sus cosas (ropa, objetos, etc), y los niños también los necesitan.

Aquí se debe tener en cuenta el tipo de estructura de los armarios, y que los pequeños puedan o no eventualmente acceder a ellos. Es decir, algunos niños pueden encontrar divertido desordenar su ropa, y si fuera el caso lo harán!

Los armarios segmentados por niveles o alturas, facilitan mantener el orden en las habitaciones de los niños, y también colocan lejos de sus manos ciertos objetos. El último nivel de almacenamiento de los armarios es perfecto para los artículos cotidianos, que necesitan ser escondidos de los más pequeños, aunque a veces los padres necesitan un acceso fácil a ellos.

- Las habitaciones de los niños tienen que ser divertidas.

Los niños necesitan ser estimulados, y la diversión puede ser un recurso muy efectivo a temprana edad. Por eso es muy importante la decoración alegre y divertida en los dormitorios de los pequeños.

Al mismo tiempo, la ciencia demuestra el hecho de que los niños se aburren mucho más fácilmente que los adultos, ya que sus cerebros están diseñados para aprender a un ritmo más rápido; factores que no conviene que sean dejados de lado.

Los colores de las paredes de los dormitorios, los juguetes y elementos utilizados en la decoración, pueden rápidamente aburrir a los niños, y en consecuencia dejar de estimularlos positivamente.

En cualquier caso, las habitaciones de los niños tienen que ser divertidas, y diferentes a la decoración de los dormitorios para adultos.

- Patrones geométricos y dibujos de animales.

En los últimos años se ha producido un considerable impulso en el uso de modelos geométricos, rayas elegantes y estampados de animales para los dormitorios de los niños. La tendencia tiene sentido, ya que estos patrones le otorgan a las habitaciones un aspecto lúdico.

Al mismo tiempo, los patrones geométricos suelen ser también del agrado de los pre-adolescentes, y los animales suelen ir dejando espacio a otros intereses. Los animales, como recurso para una decoración flexible, pueden estar presentes en forma de muñecos; los cuales eventualmente el niño dejará de lado, sin necesidad de pintar nuevamente las paredes de la habitación para redecorar la misma.

Ciertos patrones geométricos y diseños pueden resultar atractivos tanto para niños como para adolescentes; incluso sin dejar de aburrir al habitante del dormitorio.

La tendencia refleja que al momento de decorar una habitación o una casa se procura el abordaje por capas, segmentando y aislando cada parte del espacio. Sin embargo, un enfoque global del espacio, es decir del todo, permite lograr mejores resultados en la decoración de la vivienda.

En el caso de las habitaciones de los niños, los juguetes y otros elementos forman la última parte del rompecabezas de la decoración del dormitorio.

Los varones pueden encontrar divertido, y conectarles con cierto aire irreverente, un simple mueble con diseños de un superhéroe. Mientras que a las niñas les puede resultar atractivo un diseño más orientado a sus gustos particulares.

Los personajes infantiles, independientemente si nos referimos a una niña o a un varón, suelen ser buenos recursos para la decoración de un dormitorio; los cuales también pueden ser flexibles y ser adaptados con facilidad al crecimiento de los niños.

La decoración de los dormitorios infantiles, como mencionamos al comienzo, pueden terminar resultando un reto para los padres. Sin embargo, prestando atención a ciertos factores y sobre todo al desarrollo de sus hijos, podrán ir adaptando las habitaciones de forma simple.