Al margen del nuestro, algunos pacientes tienen su propio vademécum, su particular forma de referirse al nomenclátor de sus remedios...
Y es que, en su consideración, las destacables características de los medicamentos serían bien distintas de aquellas a las que nosotros, los sanitarios, solemos referirnos...
Para ellos, unas veces es el color, otras, la forma del comprimido, incluso aspectos tales como las similitudes de la fonética del nombre, o la forma en la que se administra y un largo etc...
Hace poco, a la consulta vino una paciente pidiéndome "la diaria": tras sorprenderme y reflexionar sobre sus palabras, comprendí que constituían su manera de demandar el anticonceptivo oral que, como este nombre indica, ella tomaba cada noche...